Me ha dejado un poco frío, creo que es una serie olvidable y continúa la tónica de Marvel con sus últimas producciones televisivas, donde lo visual prima sobre la historia (a veces ni eso...). Echo vuelve a ser un producto que funcionaría más como película que como serie, aunque en este caso concreto no sé muy bien que ha pasado, pero la trama avanza a trompicones y da la sensación de estar mal escrita, no digo que la idea sea mala, pero creo que está mal plasmada.

La producción de esta serie es un quiero y no puedo, los personajes que aparecen no tienen el carisma suficiente, y Kingpin... ¡Por amor de Thanos!, ¿qué le han hecho a Kingpin...?, era un personaje redondo en la serie de Netflix y aquí no es ni una sombra de lo que debería ser. Sigo pensando que el problema está en el guión, y espero equivocarme pero visto lo visto no auguro un gran futuro al resto de series del MCU en Disney+, la de Daredevil en la plataforma roja fue demasiado buena y dejó el listón muy alto... O se ponen las pilas o seguiremos recibiendo productos mediocres que no aportan más que entretenimiento pasajero.

Comienza aparentando ser una serie de adolescentes picantona con un cierto toque de humor británico, pero con el paso de los capítulos te vas dando cuenta de que es mucho más... Imaginemos que esta serie es una cebolla, bien, la primera capa sería la que he mencionado anteriormente, la quitamos y aparece una nueva, aquí la cosa va de sexualidad, de problemáticas que afectan a la sociedad estudiantil, de un sistema educativo que no informa lo suficiente sobre según que temas... Pero una vez más quitamos esa capa y nos encontramos con la gestión de emociones, empatía, aceptación de un@ mism@... Y seguimos una y otra vez hasta dar con otros aspectos como la psicología, inclusión, celos, toxicidad, positivismo, amistad, amor y atracción, crisis, diferencias, traumas...

Todo ello tratado desde una perspectiva pseudo-realista, que aparentemente busca acercarnos a los diferentes puntos de vista de cada personaje, facilitando que nos podamos poner en su lugar y de alguna manera poder empatizar con como se sienten. Los personajes están bien escritos, tienen problemas más o menos creíbles y aunque las soluciones a veces sean un poco utópicas, dentro de la ficción queda realmente bien. Las relaciones están bien construidas y la interacción no se siente demasiado forzada, teniendo en cuenta el formato de presentación de la serie (que es el típico de capítulo=problema y resolución), además tenemos una trama por temporada que ahonda más en dichas relaciones y deja con ganas de más.

Respecto a calidad del producto, creo que las tres primeras temporadas son bastante más redondas que la última, ya que en esta desaparecen varios personajes y todo se vuelve mucho más utópico e idealizado, llegando a dar la sensación a veces de que dichos personajes están en una especie de burbuja. Pese a ello, el final, aunque agridulce, es satisfactorio y da para tertulia. A modo de reflexión personal, lo que hace a esta serie recomendable es su potente mensaje, que nos invita a querernos y apostar por la empatía, aceptación, aprender de los errores y mejorar.

Segunda adaptación televisiva de la novela histórica "Shogun", ambientada en el Japón feudal, concretamente en la época del pos-Colonialismo, que cuenta con personajes "ficticios" que en realidad se basan en personajes históricos reales. La novela trata en líneas generales sobre el ascenso al poder por parte de Yoshi Toranaga, centrándose en una serie de conflictos, intrigas y luchas de poder con el objetivo de obtener el codiciado título de Shogun.

Centrándonos en la serie, si hay algo que esta hace genial es mostrarnos el contraste tan basto que hay entre la cultura japonesa y la occidental, y lo hace mostrándonos multitud de escenas cargadas de simbolismo y belleza. El contexto y las situaciones ayudan a que te sientas identificad@ con el protagonista, sentir que estás rodead@ de elementos que desconoces y que son completamente diferentes a aquello con lo que estás más familiarizad@.

El apartado visual y el diseño de producción son magníficos, así como la ambientación, diseño de vestuario, fotografía, banda sonora... Es difícil no pensar en que esta producción será con casi total probabilidad una de las mejores del año. A nivel de guión la historia cuenta con varios giros interesantes, especialmente en última instancia, apostando por la intriga y los entramados políticos en pos de la acción, cabe señalar que los diálogos son probablemente el punto fuerte de esta serie.

La serie está casi en su totalidad grabada en japonés, obviando algunos diálogos que se supone que deberían estar en portugués, pero que por el motivo que sea los tienes en inglés (en este caso apuesto por la versión doblada ya que en español digamos que "cantan" algo menos). Es importante que conozcáis este aspecto antes de ver la serie, ya que si no estáis familiarizad@s con los subtítulos... ¡aquí os vais a hartar! XD, de lo contrario no habrá problema alguno.

Advierto también, si aún no os habéis decidido a verla, que si estáis esperando un producto de acción y batallas de samuráis, esta producción va más bien encaminada a las conspiraciones y el "ir siempre un paso por delante" de los enemigos, así que NO veréis grandes batallas ni nada por el estilo. Si tenéis eso claro disfrutaréis mucho más de la serie.

Para terminar, como argumento muy a favor de la serie, comentaré que me ha parecido especialmente interesante su forma de retratar las costumbres de los diferentes personajes, dándonos una visión bastante acertada de la cultura y las religiones de aquel momento, así como la forma de pensar que tenían los japoneses en ese período histórico, el modo en que veían la vida y la muerte... Es fascinante como esta serie te acerca a todo ello, generándote cierta empatía por prácticamente tod@s los personajes.

Se plantea como una especie de homenaje a varias historias de Edgar Allan Poe, y a su vez una de ellas es la que da nombre a la serie "La caída de la casa Usher". Al igual que en anteriores trabajos de Mike Flanagan, el misterio es uno de los ingredientes fundamentales, la historia va evolucionando con cada capítulo y se van desvelando pequeños detalles que anticipan el verdadero final, episodio a episodio.

En líneas generales me ha gustado y me ha resultado intrigante, destacaría las actuaciones de Carla Gunino y Kate Siegel, que como viene siendo habitual suelen lucirse con este director, los diálogos también son interesantes, al menos los que involucran a los personajes que más peso tienen en la serie, recurriendo mucho a denuncias de tipo social sobre todo. Por último, me ha convencido especialmente el capítulo final, que cierra de forma bastante acertada la historia, con una reflexión poética.

Por poner alguna pega, diría que algunos de los personajes están mal desarrollados o no son lo suficientemente profundos como para llegar a empatizar un mínimo con ell@s, aunque como comentaba anteriormente, en cuanto entran a escena los tres/cuatro personajes principales hacen que te olvides de ello rápidamente.

En conclusión, una serie recomendable si te gusta lo que viene haciendo este director, ya que está más o menos en consonancia con sus anteriores productos, que ya de por sí aportan cierta frescura al género de terror (donde suelen abundar los productos mediocres), enriqueciendo sus historias con algo de suspense y una forma un tanto peculiar de narrar los hechos.

Conclusión a la historia de Rick y Michonne que, a mi parecer, va de más a menos, ya que comienza mostrándonos un protagonista desesperado por huir, literal y metafóricamente roto, y a otra desesperada por encontrarlo, hasta ahí más o menos bien, pero es a partir del punto de inflexión cuando la historia sufre un bajón enorme, dando una mayor importancia a la parte romántica y abandonando un poco todo lo que se había construido en los primeros capítulos, porque "que quede claro..." aquí lo importante son los protagonistas, lo demás es todo secundario (nótese cierta ironía).

Hay algunos aspectos a destacar como la actuación de Andrew Lincoln, una vez más demostrando que es el protagonista absoluto del universo The Walking Dead, además, se puede apreciar cierta mejoría en los efectos visuales y fotografía respecto a la serie madre. Su banda sonora también destaca ligeramente por encima de otros apartados.

Finalmente, la sensación es que con el hype que teníamos l@s seguidores de TWD por volver a ver a Rick, la historia queda un poco descafeinada, quitando un par de momentos buenos que elevan el tono y le dan cierta visceralidad. Podría haber sido más, pero es el desenlace que tenemos y habrá que conformarse.

The Continental se vende como una especie de precuela ambientada en el universo de John Wick en la que se muestran los inicios de Winston Scott y como éste logró hacerse con el control del famoso hotel. El inicio de la serie está bien, contando con personajes interesantes y algunos momentos decentes de acción, pero es en su clímax donde comienza de alguna manera a desvirtuarse un poco del lore de las películas, ampliando de forma dudosa lo que ya conocemos respecto a la Alta Mesa, su funcionamiento y un Winston que no termina de hacer justicia a la versión que conocemos de Ian McShane.

La serie cuenta con una buena banda sonora, es entretenida y su producción es decente para tratarse de un producto de TV, aunque la duración de los episodios es algo extensa y te puede hacer sentir por momentos como si estuvieses viendo una trilogía de películas, separar todo en capítulos de menor duración, o diréctamente omitir algo de metraje y hacer los episodios más cortos podría haber sido una solución más viable para contarnos la historia.

A modo de conclusión, en conjunto y teniendo en cuenta que se trata de una "mini" historia cerrada, podría decir que no me ha disgustado del todo, aunque creo que luciría mucho mejor como película, omitiendo gran parte del capítulo 2 y condensando de alguna forma los mejores momentos del primero y el último. Independientemente de ello, si te gusta el universo del bueno de John, aquí tendrás una pequeña ampliación del lore con algunas buenas dosis de acción, que al fin y al cabo es por lo que venimos a consumir este tipo de productos.

No está mal, aunque un poco floja, tenía cierto hype por como la ponían las críticas y me he llevado más bien una decepción por su tono infantil y el argumento simplón, ni de lejos me parece tan buena como dicen, de hecho hay algunos capítulos en los que parece que la trama no avanza absolutamente nada y te acaban dejando un poco frío, lo positivo es que son capítulos cortitos y se pasan volados... Si tuviese que destacar algo serían los efectos visuales, además de algún cameo interesante en los últimos capítulos (donde aparecen los dioses importantes) , pero más allá de ello, me ha parecido algo más aburrida que las películas, aunque se dice que como adaptación es más fiel a los libros. Imagino que cuando vayan hilando cabos en las siguientes temporadas la calidad de la serie mejorará ligeramente.

Tras dos temporadas tengo que decir que, con muchísima diferencia, esta es la mejor serie del UCM hecha por Disney, es más, es tanta la diferencia que hace que productos como Secret Invasion, She-Hulk, Ms. Marvel, etc. se sientan vacíos.

Admito de desde siempre Loki ha sido mi personaje favorito dentro de universo Marvel, pero es que su desarrollo en esta serie lo eleva a otro nivel de profundidad, realizando un viaje personal de autodescubrimiento y tratando de sacar la mejor versión de sí mismo. Todo esto unido a la movida de los viajes en el tiempo, las líneas temporales, la AVT... Un cóctel explosivo de ciencia ficción que personalmente me ha encantado.

Y si hablamos del final... joder, realmente es lo que hace que el resto de la serie tenga sentido y le da ese salto de calidad. Loki finalmente consigue su glorioso propósito, alejándose de todo aquello que le importa, el personaje madura/evoluciona y termina encontrando su lugar para luego tener que abandonarlo, casi de forma poética, ya que lo acaba sacrificando todo para salvar el libre albedrío y formar un nuevo árbol temporal... Un verdadero arco de redención para un personaje que empezó siendo un villano y que ha ido creciendo hasta convertirse en el mayor héroe dentro del UCM.

Te podrá gustar más o menos, pero si hay algo que no le falta a esta serie es originalidad. La producción brilla a la hora de presentar una historia que bien podría haber sido una comedia con tintes dramáticos y llenarla de matices que la convierten en un producto más inédito, íntimo y llamativo. En ese aspecto, bravo por "Los Javis", porque lo que han hecho con esta serie es algo más que un gran trabajo.

Uno de los aspectos más destacables de la serie es el excelente nivel de sus actuaciones, no solo de su reparto adulto (que es muy bueno) sino del infantil, regalándonos momentos realmente convincentes que te transportan fácilmente al contexto de la narración. A veces cuesta pensar como niñ@s tan pequeños pueden brillar tanto delante de las cámaras, el sentimiento que transmiten con cada plano unido a su inocencia hacen que sea fácil empatizar con ell@s y la situación que viven.

La trama que se nos presenta es espeluznante a la par que intrigante, y se desarrolla a través de la estructura narrativa "presente-pasado", descubriendo la historia mediante el uso de flashbacks que con el tiempo servirán para entender mejor a los personajes y empatizar con ellos. La fotografía y la BSO se encargan de preparar la atmósfera para lo que viene, regalando momentos de auténtico "malrollismo" que probablemente se te quedarán grabados en la retina.

Si estás dudando sobre verla o no, recomiendo que le des una oportunidad (tras un par de capítulos la trama arranca fuerte), es una propuesta tan extraña y arriesgada que, mínimo, no te dejará indiferente.