Redactada: 2024-03-05
Aceptar a los demás puede ser un trabajo difícil de gestionar, pero posible. Requiere paciencia.
Aceptarse a uno mismo, es muy complicado y más si no eres consciente de quien eres.
Eso le pasa a la juventud en su camino hacia la maduración, y a los adultos que no aprendieron a superar una de las etapas más conflictivas de la existencia humana, también.
Aquí desarrollaremos la historia en un colegio mayor o internado como se prefiera. En la época más deseada para la mayoría de los allí residente, las vacaciones navideñas. Volver con sus familias al acogedor hogar para celebrar por partida doble el descanso y romper las obligaciones establecidas en aquel tipo de prisiones.
Pero siempre hay alguien que pringa en un entorno tan idílico. No todos los hijos de papi podrán volver con sus familias por diversos motivos y deberán pasar ese periodo a recaudo de un profesor designado para la ocasión.
Pero antes ya habremos hecho las presentaciones de nuestros personajes, las valquirias son portadoras de suspensos para filisteos y réprobos alumnos de un profesor de historia clásica, intransigente y malhumorado. Unos alumnos a punto de ebullición y una cocinera que deberá lidiar con demasiadas ausencias.
Y encerraremos a estos tres cabezones en ese excelso edificio. Sitiados por la nieve. Aunque particularmente no hay nada mejor para el aburrimiento que un profesor que vive la historia con tal pasión, todo anécdotas, datos curiosos, mil aventuras.....
Pero no todos piensan lo mismo y es un personaje odiado por la mayoría.
Tres corazones rotos, tres solitarios cada uno con su particular cruzada a cuestas. Pero ninguna con un final previsible, más bien una prolongada agonía existencial sin atisbo de solución.
Iremos desarrollando sus miserias a la par que sus anhelos, consiguiendo un nexo de unión, porque si algo nos demuestra la historia es que no se va a esperar a que te recuperes y atacará por sorpresa cuando menos lo esperes. Y hay que estar unidos ante las adversidades.
- La vida es como una escalera de gallinero, les recrimina en un momento de egolatrismo púber.
Pero me quedo con una frase que yo utilizo de otra forma pero su significado es similar : - La historia, no solo es el estudio del pasado. Es la explicación del presente.
La historia esta bien, aunque flojea en muchos aspectos, Paul Giamatti repite a las ordenes de Alexander Payne tras Entre copas, y no defrauda, es un actor excelente y más con un personaje tan iracundo. Y aunque al principio no ha captado mi atención, Dominic Sessa ha ido construyendo un personaje que llega al nivel de Giamatti en algunas ocasiones protagonizando un gran dueto. La tercera en discordia Da´vine Joy Randolph que aporta sobriedad y fuerza bruta pero no le veo un papel como para nominarla a un premio.
Podría tener mejor puntuación, pero la banda sonora rollo folkie deprimente me ha sobrado muchísimo, enfadándome en más de una ocasión por la forma brusca de reducir velocidad de impacto a lo que estábamos viviendo. Un destrempe y una pena, porque otra elección más simple creo que hubiese bastado.
P.D. Olvidaba una recomendacion que creo está a un nivel superior de exibicion que esta Holdovers y es Another Country de 1984, interpretada por Ruppert Everett y Colin Firth y Cary Elwes.
Excepcional.
Guion
0 ✮
Banda sonora
0 ✮
Interpretación
0 ✮
Efectos
0 ✮
Ritmo
0 ✮
Entretenimiento
0 ✮
Complejidad
0 ✮
Sentimiento
0 ✮
Duracion
0 ✮
Credibilidad
0 ✮
Fotografía
0 ✮
Dirección
0 ✮

Valoraciones en tu crítica:

Comentarios

Todavía no hay comentarios