Crítica de Baby por Obscuritas

La primera temporada no me encantó pero decidí darle una oportunidad a esta segunda, sobre todo por lo cortas que son y porque al final no deja de ser una serie para no pensar demasiado. Pero me bajo aquí, he visto la mitad de esta segunda y se me está haciendo cada vez más cuesta arriba, además de que los capítulos cada vez son más largos, y también se me hacen más largos y más pesados.

Los personajes y las tramas siguen siendo constantes clichés, entre la profesora que se acuesta con el alumno, el hombre que está a punto de cometer adulterio y se da cuenta de que es una menor y luego resulta ser el nuevo profesor, el abusón homófobo que resulta ser homosexual, que la madre de una alumna y el padre de otro alumno terminen liados y los compañeros pasen a ser hermanastros... Todos los clichés habidos y por haber de este tipo de series están aquí, algunas recuerdan a Élite, otras a Física o Química... Lo mismo me da que me da lo mismo.

Y las protagonistas es que cada vez son peores, sus decisiones son cada vez más cuestionables, y entiendo que están metidas en un mundo complicado, pero es que se han metido porque les ha dado la real gana. Luego ya que si chantajes, que si amenazas, que si lloros, y más decisiones cuestionables.

El tercer capítulo me ha costado terminarlo, y duraba casi una hora, y se me ha hecho realmente cansino, así que hasta aquí.