Crítica de Till Death. Hasta que la muerte nos separe por JPQP

¿Por qué no le parte el jodido pulgar?

El minucioso plan del psicópata del esposo de la protagonista es básicamente el siguiente: la deja aislada en una cabaña sin posibilidad de usar el teléfono para pedir ayuda, sin poder usar el coche para escapar y sin herramientas para cortar la mano del difunto. Pero aparentemente se sostiene en que la protagonista desconoce que dislocando el pulgar puedes soltarte de las esposas.

Yo suponía que esto era como cultura pop. Y la película hubiera durado poco más de veinticinco minutos si ella hubiera hecho esto; incluso con el elemento de los asesinos a sueldo, porque para cuando hubieran llegado ella ya haría tiempo que se habría ido.

Que encima si ella fuera la que tuviera que tener el pulgar dislocado entendería que aun sabiendo eso decidiera no hacerlo (aunque si intenta disparar a la cadena a la parte que queda pegada a su mano en lugar del otro extremo ...), entendería el no hacerlo, pero no veo ningún motivo para no hacer lo otro: la protagonista se recupera rápido del susto inicial y la película nos muestra que mucho antes de esto ella era una luchadora (por mucho que ahora esté en una relación abusiva ).

Lo peor es que, sosteniéndose en fingir que algo tan básico no existe, esta parte es la más tensa. Una vez llegan los asesinos, la película se vuelve un cliché de víctima escapando de los malos; encima, sabiendo que si ellos la ven cuando ella está esposada al cadáver no tendrá como huir, queda claro que no la verán hasta que se libere.

Con ello, una premisa interesante, que cae en mi tropo favorito del thriller (un ambiente remoto y un número reducido de personajes), se vuelve simplemente un juego de ratón y gato por escapar que no aporta nada especial a obras que preceden a esta.

Tenemos el malo violento, el que no quiere que nadie salga herido, el conflicto entre ambos por este hecho que será lo que usará a su favor la protagonista...

Encima al final para dar algo de tensión, la prota tendrá la pierna herida para ir cojeando, justo cuando ella esposa al cadáver al malo principal, elemento que tiene cierta justicia poética y acaba en nada porque no representa mayor problema para este que la cojera para ella .

Yo decidí ver este film sin leer la sinopsis; simplemente con el póster supuse que era algo a medio camino entre Gerald's Game y The Ledge, y lo cierto es que acerté (a punto de saber el porqué acabaría la protagonista esposada al cadáver de su marido); por tanto, es una historia que resulta previsible, por lo que tratar lo que siente la protagonista en esta situación hubiera sido lo mejor, porque aunque incluso el desarrollo hubiera tenido problemas (en serio, ¿por qué ni se le ocurre romperle el dedo?) hubiera estado distraído pensando en el frío que pasa la protagonista, o lo que le cuesta moverse por la nieve; en cambio, que me presenten un par de asesinos que sé que no la van a atrapar hasta que ella tenga la posibilidad de huir, y que por otro lado sé que no la matarán aunque la atrapen porque si ella tuviera que morir si acaso sería al final de todo, pues me provoca indiferencia por más que las escenas intenten presentarlas de manera tensa.

Por si fuera poco, Megan Fox, que hace unos años parecía ser contratada para cubrir el puesto de «tía buena» demuestra una gran calidad actoral; pero claro, para mantener la trama debe hacer un montón de decisiones estúpidas, y ojalá esto se limitara al dedo, pero no, también está por ejemplo cuando al final el malo principal tiene el revolver que ella sabe que no tiene balas y en lugar de aprovechar para moverse y coger el cuchillo, decide esperar a que este intente disparar, vea que no está cargado y ahí sí se mueve para que él no tenga problemas en reducirla . Con ello su personaje parece menos un personaje y más un motor para hacer andar la trama,

En definitiva, los primeros dos actos del film, en especial el segundo, cuando la tenemos a ella sola intentado escapar, considero que hacen de esta película una maravilla muy recomendable, incluso con el tema del dedo (¡pártele el puto dedo, hostia!); luego, con la llegada de los asesinos la película empieza a ir cuesta abajo, puede entretener y la manera de presentar las escenas trabaja bien la tensión, pero mientras la primera parte podría llevar a cualquier final, esta tiene un desenlace muy evidente.