Crítica de Eduardo Manostijeras por Gaspar
Redactada: 2023-12-30
La perversión de la condición humana a través de Tim Burton
Sinopsis
Durante una noche de nostalgia navideña, una anciana explica a su nieta por qué nieva. Eduardo Manostijeras, el protagonista del relato, es una máquina inacabada de un pintoresco inventor.
Crítica
Recuerdo que de pequeño me daba miedo la película. Y con la excusa de no acordarme del argumento, sólo teniendo un pequeño recuerdo de sensaciones y alguna imagen del genio de Depp, decidí volverla a ver.
En efecto, Burton utiliza algunos elementos que pueden infundir terror a un niño pequeño. El director crea un mundo que combina la perversión del estilo gótico mezclado con un Art-Pop sesentero. Algo que para un infante pues sí puede resultar impactante.
Es mediante estos 2 estilos artísticos que Burton ordena el mundo en el que transcurre el relato. Primero parte de un significado, la perversión. A partir de esta herramienta contrapone los dos mundos de Edward, el del entorno donde fue engendrado por el doctor Vicent Price y el del vecindario que le rodea. Mientras que el primer mundo es aterrador, oscuro, lúgubre, desordenado y sucio, de color fríos que recuerda al blanco y negro, el otro es la contraposición. El vecindario es un entorno de los años 60s colorido y exagerado. Para lograr esta exageración se utiliza el Art-Pop, tanto en objetos como en el muestrario del color (Andy Warhol es un ejemplo de este tipo de corriente artística).
El emplazamiento se presenta como una estampa cromática plana. Esta percepción se genera gracias a la utilización de un mismo estilo formal para las casas, prácticamente no hay variaciones compositivas entre viviendas. El cromatismo de éstas también permite tener esta sensación de repetición debido a que todas las viviendas son monocromáticas. Ésto va acompañado de un ambiente limpio, ordenado, de límites sin vallas, sólo el césped, una alfombra que llega hasta la calzada. Hasta hay una escena que muestra como a primera hora de la mañana, como si de una coreografía se tratara, todos los hombres del vecindario salen de casa a la misma hora, entran en sus coche y parten a trabajar a la vez.
Burton, además de exagerar y pervertir los mundos en los que Edward interactúa también pervierte la extremidad que nos distingue de los demás homínidos. Múltiples estudios concluyen que el movimiento del pulgar hacia el interior de la mano, el pulgar puede tocar la palma en los humanos, es un rasgo indefectible que interviene en el desarrollo humano como animal inteligente.
Burton pervierte este rasgo distintivo hasta el extremo, no es que deje a Edward sin manos, es más cruel, le abastece de unas herramientas que le imposibilitan practicar situaciones cotidianas.
Cualquier elemento o muestra del entorno trata de ser una contraposición a la arbitrariedad de las manos de Edward. Al personaje interpretado de maravilla por Johnny Depp no se le juzga por su aspecto físico, lo juzgan por la incapacidad de realizar una actividad cotidiana, por ser incapaz de adaptarse a un mundo para lo que no fue pensado.
En este momento, el espectador entiende la crueldad a la que se enfrenta Edward, y es cuando se apiada de él, empatiza y siente compasión. Sentimientos que se enfrentan a las injusticias con las que debe lidiar el protagonista. Injusticias que le llevan, pese a sentir amor, a poder disfrutar de él. Toda una inmerecida crueldad.
Sinopsis
Durante una noche de nostalgia navideña, una anciana explica a su nieta por qué nieva. Eduardo Manostijeras, el protagonista del relato, es una máquina inacabada de un pintoresco inventor.
Crítica
Recuerdo que de pequeño me daba miedo la película. Y con la excusa de no acordarme del argumento, sólo teniendo un pequeño recuerdo de sensaciones y alguna imagen del genio de Depp, decidí volverla a ver.
En efecto, Burton utiliza algunos elementos que pueden infundir terror a un niño pequeño. El director crea un mundo que combina la perversión del estilo gótico mezclado con un Art-Pop sesentero. Algo que para un infante pues sí puede resultar impactante.
Es mediante estos 2 estilos artísticos que Burton ordena el mundo en el que transcurre el relato. Primero parte de un significado, la perversión. A partir de esta herramienta contrapone los dos mundos de Edward, el del entorno donde fue engendrado por el doctor Vicent Price y el del vecindario que le rodea. Mientras que el primer mundo es aterrador, oscuro, lúgubre, desordenado y sucio, de color fríos que recuerda al blanco y negro, el otro es la contraposición. El vecindario es un entorno de los años 60s colorido y exagerado. Para lograr esta exageración se utiliza el Art-Pop, tanto en objetos como en el muestrario del color (Andy Warhol es un ejemplo de este tipo de corriente artística).
El emplazamiento se presenta como una estampa cromática plana. Esta percepción se genera gracias a la utilización de un mismo estilo formal para las casas, prácticamente no hay variaciones compositivas entre viviendas. El cromatismo de éstas también permite tener esta sensación de repetición debido a que todas las viviendas son monocromáticas. Ésto va acompañado de un ambiente limpio, ordenado, de límites sin vallas, sólo el césped, una alfombra que llega hasta la calzada. Hasta hay una escena que muestra como a primera hora de la mañana, como si de una coreografía se tratara, todos los hombres del vecindario salen de casa a la misma hora, entran en sus coche y parten a trabajar a la vez.
Burton, además de exagerar y pervertir los mundos en los que Edward interactúa también pervierte la extremidad que nos distingue de los demás homínidos. Múltiples estudios concluyen que el movimiento del pulgar hacia el interior de la mano, el pulgar puede tocar la palma en los humanos, es un rasgo indefectible que interviene en el desarrollo humano como animal inteligente.
Burton pervierte este rasgo distintivo hasta el extremo, no es que deje a Edward sin manos, es más cruel, le abastece de unas herramientas que le imposibilitan practicar situaciones cotidianas.
Cualquier elemento o muestra del entorno trata de ser una contraposición a la arbitrariedad de las manos de Edward. Al personaje interpretado de maravilla por Johnny Depp no se le juzga por su aspecto físico, lo juzgan por la incapacidad de realizar una actividad cotidiana, por ser incapaz de adaptarse a un mundo para lo que no fue pensado.
En este momento, el espectador entiende la crueldad a la que se enfrenta Edward, y es cuando se apiada de él, empatiza y siente compasión. Sentimientos que se enfrentan a las injusticias con las que debe lidiar el protagonista. Injusticias que le llevan, pese a sentir amor, a poder disfrutar de él. Toda una inmerecida crueldad.
Guion
5 ✮
Banda sonora
4 ✮
Interpretación
5 ✮
Efectos
5 ✮
Ritmo
5 ✮
Entretenimiento
5 ✮
Complejidad
4 ✮
Sentimiento
5 ✮
Duracion
5 ✮
Credibilidad
5 ✮
Fotografía
5 ✮
Dirección
5 ✮
Valoraciones en tu crítica:
Todavía no hay comentarios
Comentarios