Redactada: 2021-04-20
Una película de crítica social revestida con algunos toques del cine bélico y sazonada con toques de comedia, que actúa al mismo de testimonio ficticio de uno de los episodios mas negros de la historia de los Estados Unidos y sus consecuencias directas en la sociedad actual. Debo decir que el momento en que esta película se estreno fue el mas propicio de todos, pues meses antes tuvo lugar el escandalo de George Floyd y, en consecuencia, un nuevo resurgir del movimiento social en defensa de los derechos de la población afroamericana, lo que conocemos por el Black Lives Matter. Sin embargo, no debemos considerar que esta película buscó aprovecharse de esa ola, primero porque su rodaje comenzó mucho antes de lo anterior y segundo porque su director, Spike Lee, precisamente se ha abierto un hueco en el cine por hacer películas y documentales de fuerte crítica social e identidad racial. Con esta película busca un poco mezclar ambos medios, la película con una trama sencilla, quizás con un tratamiento de la guerra muy superficial, y el documental, con la introducción de fragmentos de fuentes primarias, fotografías reales y mucho contexto histórico. El escenario, evidentemente, tenia que ser la guerra de Vietnam, no solo porque las guerras europeas tienen mas que saturado el panorama del cine bélico, sino porque precisamente esta guerra supuso un verdadero trauma para el “invicto” sueño americano. Ni que decir tiene que si este conflicto supuso una profunda herida para la población norteamericana blanca, sus efectos iban a ser mucho más notables en la población afroamericana. Prueba de ello las tenemos en las constantes menciones a Martin Luther King, hombre negro y una de las principales voces que se alzaron en la época para frenar la barbarie de la guerra y sus nocivas consecuencias sobre los afroamericanos.

La trama es simple pero efectiva, unos excombatientes que salieron de la guerra como auténticos hermanos de armas cumplen la promesa de regresar para recuperar los restos mortales de uno de ellos que no logró sobrevivir al conflicto. Decía que el tratamiento del conflicto en sí y sus secuelas puede que no esté tan bien tratado (inexactitudes, maniqueísmo, frivolidad), pero si sabe captar ese choque generacional y étnico entre aquellos que aun recuerdan el conflicto y presentan aun prejuicios y entre aquellos que no guardan recuerdo de este y por tanto no se encuentran condicionados por este. Ver a estos excombatientes comportándose como verdaderos turistas me trae a la mente una frase del Tío Iroh en Avatar “Quien me iba a decir que después de tantos años iba a regresar al lugar de mi peor desgracia militar……como turista”. A parte del componente meramente histórico, solo podría echarle en cara una duración un tanto excesiva, pues llega a hacerse un tanto cargante en el tramo medio y final. Por lo demás, la considero una película entretenida y que ayuda a revisar los grandes conflictos bélicos de la historia desde una perspectiva distinta.
Guion
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Banda sonora
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Interpretación
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