No es que sea excesivamente graciosa pero como como los chistes abarcan prácticamente todo el abanico del humor pues de al menos de uno te vas a reír. Además había una persona cerca de mi riéndose todo el rato y me daba la risa también.

La peli en sí es terrible. Nada que no se supiera de antes.

Era difícil hacer una película de esta mítica saga de comedia en pleno 2025 pero finalmente se ha logrado y con bastante éxito. La mano de Seth MacFarlane está detrás de esta cinta protagonizada por Liam Neeson y Pamela Anderson, a veces la película se pone muy "padre de familia" y otras combina muy bien el homenaje a la saga "Agárralo como puedas" e incluso va mucho más lejos y homenajea "Police Squad" la serie de Tv donde Leslie Nielsen inició su andadura como el policía Frank Debrin. Además la película cuenta con algunos cameos curiosos y no se queda corto en cuanto al humor.

Conozco la trilogía original de haberla visto de pequeño, sin mucho caso. De hecho, más allá de Leslie Nielsen y un puñado de escenas que no tengo muy claro a cuál de las tres originales pertenecen, mi relación con la saga es una mezcla de nulidad y recuerdo de infancia más turbios que claros.

Cuento esto porque, sin ser yo un fan de nada de esto, salgo del cine con una cierta sonrisa. La película es una chuchería: no tiene pretensiones y es relativamente corta (una hora y media).

Chistes los hay a puñados y de todas las variedades: desde gags de eslápstic (golpes y porrazos), zafios (ver que se simula sexo a través de una cámara térmica), del género (esas tazas de café que continuamente parecen de la nada), generacionales (las referencias a los actores originales) y otros tan sutiles que te pasan por encima de la cabeza tan rápido que ni te enteras ("escribo novelas basadas en crímenes reales que yo me he inventado"). La acumulación del chascarrillo conlleva que, tarde o temprano, alguno te haga gracia, aunque haya otros que te resbalen.

Papelones los de Liam Neeson y Pamela Anderson, que abrazan sin temor la parodia de sí mismos: él, como figura de acción hipertrofiada que reparte galletas a mansalva; ella, como 'femme fatale' absurda, lista y otra vez absurda, según convenga al guion. Mención aparte al hecho de que, tras la película, ellos sean ahora pareja. Qué bonito teniendo en cuenta la trayectoria vital de ambos.

Ya digo que, sin ser ningún peliculón ni yo su público objetivo, me ha sorprendido para bien. Cumple lo que promete y es buena en su género.

Para mí, un siete.