Mientras estaba viendo esta película, haciendo gala de su habitual espionaje, Google me ha sacado una noticia titulada "Por qué el James Bond de Sean Connery ya no puede ser un modelo a seguir en el siglo XXI", y es que esta película es el mayor ejemplo de ello. Sí, claro, eran otros tiempos y otras formas, en eso estamos de acuerdo, pero también lo eran las tres primeras entregas, todas ellas de los años 60, y, dentro de como es el señor Bond, ninguna estaba tan cargada de machismo como esta, y es que es un no parar de perlitas que sueltan durante todo el metraje, y eso me ha sacado por completo de la película, aunque no es lo único.

Si con Goldfinger dije que era la que más me había gustado hasta la fecha, no sólo lo mantengo, sino que esta es la que menos me ha gustado hasta ahora. Se vuelve a alejar del Bond elegante en misión de espionaje y hay más acción, acercándose un poco más al género de aventuras que veíamos en la de Dr. No, y es que la particularidad de Operación trueno frente a sus predecesoras es que el agente 007 se pasa gran parte de la película bajo el agua, incluso llega a protagonizar una escena más propia de las chicas Bond por lo general.

Hablando de chicas Bond, aquí tenemos a la famosa Domino, interpretada por Claudine Auger, con un bikini en blanco y negro que seguramente será de los que han pasado a la historia en esta saga.

Pero la otra cosa que me ha sacado por completo de la película es que, siendo la cuarta entrega, y a pesar de ser los años 60, con un presupuesto que fue elevado gracias al éxito de las anteriores películas, es todo muy falso, hasta el punto de que resulta cómico cuando no debería. No sólo se ven demasiado los cromas, sino que, como digo, se pasan gran parte de la película bajo el agua, y eso no juega a su favor, pero es que hay escenas como cuando llega el avión bajo el mar, que no podría notarse más que era de juguete. Creo que precisamente se nota más que en las anteriores porque han intentado llegar más lejos, demasiado dados los recursos de la época.

En el lado positivo, vemos un poco más de la organización SPECTRE y también del MI6, aunque del villano por excelencia, el jefazo, seguimos sin ver más que su gato.

Aprueba porque es entretenida, tiene acción, persecuciones... lo normal en estas películas. Pero por los pelos.

Siempre me ha gustado que me recuerden el título de las películas mientras la estoy viendo.

Ha diferencia de la anterior entrega, en esta ocasión me ha convencido más con respecto a la historia, teniendo personajes más solidos que pueden contar una trama muy entretenida.

Poco se puede de comentar de Sean Connery, desde mi punto de vista, el personaje de James Bond le viene como anillo al dedo. Realiza en cada una de las películas un trabajo increíble.

Por otro lado, vamos conociendo un poco más a Spectra y de lo que puede realizar una persona sentada en un sillón caro y acariciando a un gato para nada contento. Solo hay que ver al enemigo del Inspector Gadget para darte cuenta de que hay que desconfiar de todo el que tenga gato.

Por lo que ha estado bien, sigue su línea de espionaje, una ambientación apropiada y, a pesar de que fue estrenada en 1965, se nota una mejor producción que las anteriores entregas.