Crítica de Cómo conocí a tu padre por Calibibi

Año 2014, acaba "Cómo conocí a vuestra madre" y en el sofá de su casa, Hillary Duff (AKA Lizzie McGuire) se dice a si misma, "Jo*** lo que daría por ser Robin Scherbatsky!" y como a lo mejor talento no tiene mucho pero dinero si, consigue los derechos suficientes para hacer un spin off, donde ella es la madre de los chavales y les cuenta la historia.

Al principio cuando escuché que esta serie se iba a hacer, pensaba que sería más cercana a la original, que sería la madre hablando de su vida como había hecho Ted Mosby en su tiempo, y que podrían ser contemporáneas, pero no. Y ese es su principal problema.
Escuché que habría cameos de los personajes de la serie principal, y los hay, pero uno por fandom puro y duro de la Duff y el otro para intentar salvar una serie que ya iba a la deriva.

Pero si nos alejamos de prejuicios, y nos centramos sólo en la serie, nada, tampoco es buena. El planteamiento es un calco, salvo por meter etnias y colectivos más de acuerdo con lo que hoy es NY, y por tratar de ser más correcta aunque esto último sale solo al no tener un Barney Stinson.
Y este es otro gran problema. Pues la serie principal tenía el aliciente de aprovechar el barbecho dejado por las sitcoms de amigos que conviven en un mismo espacio como una familia (no hace "friendta" decir nombres) y además de contar con uno de los mejores personajes que recuerdo.

Y la música... Ya se que es el principal campo de la productora/esto es mio y hago lo que me da la gana/protagonista de la serie, pero la cantidad de versiones de canciones me hace creer que estoy viendo en tu casa o en la mía, y que en cualquier momento sale Bertín, que por cierto habría clavado el papel del cocinero mayorcete si habeis visto la serie, habría sido un bombazo.

En fin, una decepción, esperada eso si, pero no por ello menos molesta, ya no me enrollo más. Totalmente prescindible