Crítica de Shrek por rubenleobcn
Redactada: 2020-05-17
Antes de 'Shrek', en el siglo XX, uno básicamente solo podía esperar a los estrenos de Disney de navidad y vacaciones de verano para ver una película de animación en el cine. Pero por suerte surgieron Pixar, Illumination y Dreamworks, y nos trajeron muchas maravillas como 'Shrek', una locura creada por Andrew Adamson y Vicky Jenson que marcaría un antes y un después.
Precisamente recuerdo la primera vez que la vi en el cine, su guión irreverente y sus personajes que descolocan, me hicieron reirme desde la primera escena. El ritmo no para en toda la película, y mejora cuando comienzan a ridiculizar los personajes de cuento estereotipados por Disney. El resultado es algo novedoso hasta entonces, una película de animación apta para niños en la que los adultos nos podemos reír y divertir tanto o más que ellos.
El resultado es una película de animación que fue capaz de arrebatar a Disney el Oscar a mejor película de animación y el Globo de oro a mejor comedia.
Otro acierto fue su banda sonora, que además de tener su propia sinfonía compuesta por Harry Gregson-Williams y John Powell, se complemento con temas pop actuales, que engancharon aún más que los banda sonora original, como el mítico «I'm a Believer» de Smash Mouth, del que nadie puede escuchar sin pensar en 'Shrek.
Ahora vas y lo cascas.
Precisamente recuerdo la primera vez que la vi en el cine, su guión irreverente y sus personajes que descolocan, me hicieron reirme desde la primera escena. El ritmo no para en toda la película, y mejora cuando comienzan a ridiculizar los personajes de cuento estereotipados por Disney. El resultado es algo novedoso hasta entonces, una película de animación apta para niños en la que los adultos nos podemos reír y divertir tanto o más que ellos.
El resultado es una película de animación que fue capaz de arrebatar a Disney el Oscar a mejor película de animación y el Globo de oro a mejor comedia.
Otro acierto fue su banda sonora, que además de tener su propia sinfonía compuesta por Harry Gregson-Williams y John Powell, se complemento con temas pop actuales, que engancharon aún más que los banda sonora original, como el mítico «I'm a Believer» de Smash Mouth, del que nadie puede escuchar sin pensar en 'Shrek.
Ahora vas y lo cascas.
Guion
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Banda sonora
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Interpretación
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Efectos
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Ritmo
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Entretenimiento
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Complejidad
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Sentimiento
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Duracion
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Credibilidad
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Fotografía
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Dirección
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