Crítica de Anticristo por Sandris

Escena en blanco y negro, imagen con zoom y cámara lenta mientras observamos como una pareja se devora íntimamente. Pura poesía. Así comienza 'Anticristo', el nombre lo dice todo. Nos enfrentamos a un relato bíblico al revés, donde no existe la salvación del alma y el pecado es una condena eterna.
Si algo define la cinematografía de Lars Von Trier es la provocación, la exploración de los deseos y los traumas más recónditos del ser humano, la eterna busca del significado de la vida (qué somos, hacia dónde vamos), el juego entre la realidad y lo onírico, la tortura física como medio de purgar el alma humana, la exploración del subconsciente y el código metáforico que utiliza para narrar sus historias. Siempre he expresado la idea de que al cineasta le encanta torturar mentalmente a los espectadores, obliga a rendir al máximo nivel para percatarse de toda la grandeza oculta en una superficie de turbulencia, hastío y desapego emocional. De forma que, para juzgar esta mausoleo interpretativo, es necesario saber que el filme está incluido dentro de lo que se denomina ''Trilogía de la Depresión'' de Von Trier, ya que el director sufría una depresión cuando la ideó. La depresión es la auténtica protagonista de la obra, la cual se manifiesta en el personaje de la madre, en su miedo irracional al bosque, en la incapacidad para verbalizar su dolor y en su ''nostalgia''. Nostalgia de un hijo muerto, arrancado de su ser. El desarrollo en capítulos nos ayuda a comprender la evolución psicológica de los personajes, que van asumiendo diversas fases hasta terminar en el clímax de destrucción y sufrimiento final.

Existe tanta simbología en la obra que es un verdadero reto captarlo todo:

-Dafoe se presenta como el salvador de la familia, el héroe mítico que protege y guarda su dolor para que su esposa no se derrumbe.
-La dualidad amor - muerte. Mientras la pareja llega al clímax sexual, su hijo muere.
-La cabaña como símbolo de los recuerdos perdidos. Su terror proviene de su propio ser, sabe que en el fondo ella ha hecho algo malo, una parte escondida de su subconsciente se manifiesta al llegar al lugar.
-Esta cabaña que tanto aterroriza a la madre se encuentra en un lugar llamado Edén. Se contrapone a la idea del paraíso cristiano para convertirse en un paisaje lúgubre y terrorífico en el que no hay espacio para la felicidad.
-La cierva que trae al mundo a una cría muerta simboliza los propios recuerdos de la pareja, el dolor de las ambas madres se equipara.
-El pánico que le produce el puente es una metáfora de su propio estancamiento, se siente inmóvil ante la superficie al igual que cuando sufre los ataques se siente petrificada porque no encuentra el modo de seguir adelante. El puente simboliza su estado actual autodestructivo.
-El zorro desmembrado. Así es como se siente, como si le hubieran amputado una extremidad.
-El placer sexual ligado al dolor, como medio de evasión. Lo que hace que se sienta culpable y se automutile para no olvidar nunca más la tragedia vivida.
-El deseo implícito de venganza contra la figura masculina que descubrimos a lo largo del filme gracias a las investigaciones de su tesis, donde se descubre que le ponía los zapatos al revés al niño para hacerle sufrir. Así castiga a las figuras masculinas de su vida por años y años de cazas de brujas hacia las mujeres. Así se refleja al final de la película cuando Dafoe es perseguido por los fantasmas de las mujeres asesinadas antiguamente.
-Los elementos cristianos que aparecen son negativos. No hay redención, ni perdón, el fin de los tiempos se acerca.

En conclusión, es muy fácil tildar a esta película de ''mala'' porque no se entienda. Con algunas cosas, pasa con casi todo en la vida, hay que pararse a analizar lo que el director quiere que veamos, lo que oculta en lo que nos muestra y lo que, al mismo tiempo, simboliza. Así es el cine de Lars Von Trier, exige el uso los cinco sentidos para disfrutar de sus obras y por eso, y muchas otras cosas, merece siempre la pena.
El rey de la paranoia lo ha vuelto a hacer. Una tortura psicológica 'made in' Von Trier que a mí me ha encantado.

PD: me fascinan las referencias del director a sus propias películas. El niño muere al caer por una ventana, en 'Nymphomaniac vol.2' (2013) el hijo de Charlotte Gainsbourg casi se cae por la ventana mientras su madre no está en casa. En ambos casos, las madres dejan a sus hijos solos para satisfacer sus deseos sexuales, relegando a los padres a un papel secundario. También la depresión que sufre Charlotte guarda varias semejanzas con la caracterización de Kristen Dunst en 'Melancolía' (2011), sobre todo en el aspecto visual y estético.