Atontados perdidos, rodeados de basura y hasta arriba de publicidad, incluso en la ropa. No hace falta viajar al futuro para saber que eso es justo lo que nos espera, y mucho antes del año 2505. El comienzo me ha recordado a Wall-E, con las montañas de basura y un hombre sin levantarse del asiento ni despegarse de la televisión, aunque me quedo con Wall-E sin lugar a dudas.

Como crítica de la sociedad y del atontamiento global al que estamos destinados es muy interesante, pero como película deja un tanto que desear, aunque cumple su función de entretener. Así que para pasar un rato y reflexionar un poco no está mal, pero no es de esas películas que vería varias veces.

Idiocracia nos presenta una ácida sátira social y una denuncia a la progresiva idiotización de una sociedad que en su proceso de globalización ha ido perdiendo parte de sus valores e identidad en favor de grandes corporaciones que lo controlan todo. Todo ello a través de una comedia que, por temática y sentido del humor, bien podría ser un capítulo de Futurama (o Los Simpson, por su carácter profético).

Peeeero por desgracia creo la película se acaba desvirtuando demasiado. La dividiría en dos partes: la primera, que dura apenas media hora y que es la que nos presenta de manera genial esa sociedad futura idiotizada; y la segunda, que acaba convertida en una comedia mucho más tonta y repetitiva y me da rabia porque la película tenía mucho potencial y creo que no se aprovecha bien.

Aún con todo, es la clase de película que es interesante ver porque es del año 2006 y desde entonces ya nos hemos acercado peligrosamente a algunas de sus predicciones.

Hay un conocido locutor de radio que a menudo en su programa, ante ciertas noticias que cuesta creer que sean reales, utiliza la frase "El ser humano se extinguirá de estupidez", y muchas veces, no puedo dejar de darle la razón ante las situaciones que vemos en la sociedad actual. Espero que realmente nos extingamos antes de llegar a los extremos que vemos aquí, porque nos lo mereceríamos. Esta película es una comedia absurda, una exageración, pero... ojo, hay cosas que van encaminadas.
Sin pensar en la situación que podría llegar a representar, simplemente como entretenimiento, tiene un efecto parecido a las de Scary movie, es ideal para una tarde tonta echarte unas risas con los amigos y comentar las burradas sin sentido. Es corta, es entretenida, y por lo tanto se deja ver.

Este es el futuro hacia el que la raza humana se está dirigiendo, hacia el atontamiento, cada vez lo tengo más claro. El principio de la película es toda una declaración de intenciones, "la evolución no siempre premia a la inteligencia". Los 3 primeros minutos son puro oro. Que pasaría si un hombre con pocas luces del presente va a un futuro donde todos son idiotas? Pues que sería el más listo y todo el mundo le trataría de loco y se reirían de él, de eso trata la película. El personaje de Luke Wilson me recuerda bastante al de Fry de Futurama, alguien de otra época en un futuro que no entiende. La película se podría considerar como una comedia absurda, pero hay que quedarse con el mensaje, para mí, haciendo un análisis más profundo, es todo un tratado de lo que le espera al ser humano en el futuro de seguir así. Atención a Terry Crews como el presidente Camacho.