
Arnold Schwarzenegger
Douglas Quaid / Hauser
Tierra, año 2084. Doug Quaid, un hombre normal con una vida tranquila, está atormentado por una pesadilla que le lleva todas las noches hasta Marte. Decide entonces recurrir al laboratorio Memory-call, una empresa de vacaciones virtuales que le ofrece la oportunidad de materializar su sueño gracias a un fuerte alucinógeno. Sin embargo, su intento resulta en fracaso. La droga resucita de su memoria una estancia verdadera en Marte cuando era el más temido agente del cruel Coohagen.
Siempre que la veía anunciar decía "algún día la veré", pero no soy muy fan de Schwarzenegger, así que ese día nunca llegaba, pero aquí estamos gracias al desafío.
He estado entretenida durante toda la película, muy mala tiene que ser una película de acción para que al menos no sea eso, entretenida y eches el rato con ella. Arnold está en su salsa, eso es innegable, repartiendo tortazos y disparando a diestro y siniestro. Sharon Stone está bastante desaprovechada a pesar de que se marca unas buenas escenas repartiendo también, pero ya le llegaría su momento con Instinto básico. Michael Ironside también está en su línea, y me he pasado toda la película preguntándome de qué me sonaba uno de los mutantes y resulta que es Dean Norris xD.
Para ser del 90 los efectos son un poco de aquella manera, de hecho es 100% ochentera, me ha recordado bastante a Terminator (sobre todo en esas escenas en las que claramente es una máscara xD), y no ha envejecido del todo bien, pero es de esas películas a las que se les perdona porque forma parte de su encanto. Además tiene frases y diálogos que incluso viéndola una vez se te quedan en la memoria, y seguro que son de los que pasan a la historia.
Viendo los avances de la ciencia y la tecnología, y la de estudios que hay sobre Marte, no resulta tan descabellado que en el futuro se viva allí, y teniendo en cuenta que aún no ha llegado la fecha en la que se ambienta la película... Quién sabe.
Clasicazo de la ciencia ficción de la mano de Paul Verhoeven, quien adaptaba el relato 'Podemos recordarlo todo por usted' de Philip K. Dick para dejarnos una de las cintas más icónicas de los 90. Al igual que el libro, la película explora temas tan trascendentales como la frágil fiabilidad de la memoria, los falsos recuerdos o la dificultad a la hora de distinguir la realidad de la ilusión; temas que además son utilizados para jugar con la percepción del espectador de principio a fin sin por ello renunciar a una historia absorbente, a un ritmo trepidante y a grandes dosis de acción protagonizadas por un Schwarzenegger en la cúspide de su carrera como tipo duro y repartidor profesional de mamporros.
Tanto el diseño de producción como los efectos especiales (ganadores del Óscar en su año) han envejecido relativamente bien, debido en parte a ese estilo retrofuturista que consiguió crear una estética atemporal y algo cochambrosa pero con encanto, muy en la línea de lo que ya ocurría en 'Robocop'. A esa ambientación se sumó también el sello característico de Verhoeven —violencia, sexo, humor negro y decadencia— para dejarnos una serie de momentos que han trascendido a la propia película, como la mujer de la triple pechonalidad, las pesadillas (y memes) ocasionados por Kuato, el taxista-robot, los caretos de plastilina de Arnold o la mítica cancioncilla que luego reciclaron los del Canal+ para las previas de los partidos de fútbol.
Del remake no voy a hablar porque quiero tener el día tranquilo y sosegado, para mí solo hay una 'Total Recall' y es esta. Imprescindible para fans de la ciencia ficción.
Desafío Total, clasicazo del cine de ciencia ficción y acción de la década de los noventa dirigida por el holandés Paul Verhoeven y protagonizada por el mítico Arnold Schwarzenegger.
La película nos sumerge en una trama compleja y vertiginosa que con una fina línea entre la realidad y la ilusión.
La trama es fascinante, Douglas Quaid interpretado por Arnold Schwarzenegger es un obrero de la construcción insatisfecho con su monótona vida y decide someterse a un procedimiento en Rekall, una empresa que implanta recuerdos falsos de vacaciones exóticas en la mente de sus clientes. Quaid elige un viaje a Marte como agente secreto, pero algo sale terriblemente mal durante el proceso. Los recuerdos implantados desatan una cadena de eventos violentos y revelaciones impactantes que lo llevan a cuestionar su propia identidad y la naturaleza de la realidad que lo rodea. Aquí viene la complejidad de la película, ¿Quién es realmente Quaid? ¿un agente secreto con amnesia o un hombre atrapado en una fantasía inducida por Rekall?
En todo momento de la película el espectador vive confuso con cual es la verdadera realidad del protagonista. La película está llena de giros inesperados y momentos surrealistas que nos hacen dudar de todo lo que vemos.
Sin ninguna duda Desafío Total fue una obra maestra de la ciencia ficción en los años noventa. Los efectos especiales, son impresionantes y se mantienen sorprendentemente bien, y eso que en aquella época no había CGI. En Marte hay paisajes urbanos futuristas y donde conviven los mutantes. Las escenas de acción son brutales, donde la violencia y la crudeza hacen acto de presencia en las secuencias de acción.
Arnold Schwarzenegger, se mueve como pez en el agua en la película, sin duda era el actor por excelencia en las películas de acción de la década de los ochenta y noventa. Si bien hay mucha acción y frases memorables, también logra transmitir la confusión y la desesperación de un hombre que ha perdido su sentido de la realidad. En el resto del elenco también podemos encontrar a Sharon Stone como la seductora y peligrosa Lori, y a Michael Ironside como el implacable Richter, ambos ofreciendo actuaciones sólidas que complementan la trama principal, además de Rachel Ticotin como Melina.
En resumen, Desafío Total es una película que ha envejecido perfectamente y que es muy disfrutable actualmente. Su mezcla de acción trepidante, ciencia ficción y dilemas filosóficos la convierte en una película muy top. Sin ninguna duda es una película que debe visionarse al menos una vez en la vida.
Ya tenían una buena base adaptando una historia de Philip K. Dick, que nunca decepciona, y resulta una película muy entretenida con puntos de suspense y comedia. Además de unos efectos especiales que hoy resultan simpáticos y un buen papel de Arnold Schwarzenegger, que tiene la virtud de saber qué tipo de actor es (y para no ser un buen actor tiene taquillazos como 'Terminator', 'Desafío total' o 'Mentiras arriesgadas').
Un ejemplo mítico e inolvidable de la ciencia ficción de los años noventa.
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