El otro día estaba en el supermercado y en la radio empezó a sonar una canción que justo el día anterior había escuchado en esta serie. Pero no una canción de un artista conocido que forme parte de la banda sonora, no, una canción de Daisy Jones & The Six, la banda de la serie. Había leído que se ha convertido en la banda ficticia con más éxito en plataformas de música, pero eso sí que no me lo esperaba, y creo que dice mucho.

Esta serie nos cuenta los comienzos, en los años 70, de esa banda de rock, desde que eran Daisy Jones por un lado y The Six por el otro y cómo se unen en una sola banda, y nos lo cuenta a modo de documental dentro de la propia serie mientras seguimos su ascenso hacia la fama y todo lo que ello supone. Vemos todo lo que conlleva ser unas estrellas de rock, lo bueno y lo malo, las relaciones, las adicciones, la familia, los errores, los secretos, los enfrentamientos, los egos... Cada capítulo es una montaña rusa, hasta llegar al último, que ha sido toda una bomba de revelaciones y emociones y he terminado soltando alguna lagrimita por varios motivos.

Sin duda no sería lo mismo, ni mucho menos, sin el increíble dúo interpretativo y musical que forman Riley Keough y Sam Claflin y la química tan impresionante que tienen de principio a fin, están los dos fantásticos y guapísimos. Y por supuesto la banda sonora, las canciones de la banda, que son todos unos temazos de lo más pegadizos que escucharé más de una vez en futuras ocasiones.

La verdad es que me costó entrar en ella, los dos primeros capítulos no me engancharon demasiado, pero en cuanto todos se unen y comienza realmente todo ya no he podido parar de verla, así que si te pasa lo mismo que a mí, te recomiendo que no la dejes y le des una oportunidad, porque merece mucho la pena. Si te gustan las películas o series musicales, y las historias de bandas, reales o ficticias, y su recorrido, probablemente te gustará.

Ya me había leído el libro de Taylor Jenkins Reid cuando se anunció la serie y se ha conseguido una buena adaptación, conserva toda la esencia. La novela también está escrita en formato de falso documental, sólo contada con las declaraciones del grupo, y el casting de los personajes de Daisy, Camilla, Karen y Simone está muy bien escogido.

Otro factor importante es que las canciones enteras venían en el apéndice del libro y era interesante ver cómo les ponían música. Las letras no son iguales en libro y serie, pero lo importante es el mensaje de la letra, que es el mismo.

Hay escenas que son idénticas y otras que se toman licencias. Por ejemplo, en el libro Daisy y Billy NUNCA se besan, y la historia termina con el vídeo de Camilla, no existe el reencuentro que muestra la serie (y me parece genial, porque la novela te deja con las ganas). Y otros detalles como que Camilla no le es infiel a Billy, Simone tiene un papel mucho menos importante y no tiene trama propia...

Una adaptación muy conseguida, a la altura de un libro que me gustó mucho.