"Jigokuraku" es una anime en el que tienes que "cerrar" tu corazón y dónde la moralidad salta por los aires, simplemente por el hecho de que sigues la historia de un grupo de asesinos, la mayoría de ellos violentos y sin escrúpulos, que son enviados a buscar el elixir de la inmortalidad a una isla misteriosa para poder borrar sus crímenes (lo que no quiere decir que piensen cambiar su modus operandi).
Durante la temporada veremos mucha acción realmente bien creada, una gran cantidad de peleas que transmiten la tensión tensión del momento y que debido a la igualdad de fuerzas o el desconocimiento de habilidades ocultas no te permiten saber quien es el ganador hasta que finalizan.
Si bien, en principio, se siguen las experiencias de "Gabimaru el vacío" tanto de acontecimientos pasados como presentes, cada capítulo va pintando un poco de la vida del resto de personajes, que como él han sido convocados para la misma misión y, por consiguiente, la empatía empieza a brotar hacia aquellos que en un principio eran simples extras, pudiendo apreciar de ese modo, al menos en algunos de ellos, desarrollo de personaje desde el inicio hasta el final de la temporada. Siendo Gabimaru, a mi parecer, el que mayor cambio experimenta.
El misterioso funcionamiento de la isla al igual que los habitantes inhumanamente humanos que la pueblan no hará más que incrementar las hipótesis más rocambolescas buscando una posible explicación a aquello que ven los personajes.
En resumen, una historia de acción y muerte, con un gran misterio envolviéndolo todo, que hace que se te encoja un poco el corazón.

Cuando oí hablar de este anime me imaginaba que al tratarse de una persona que comienza a trabajar como aprendiz de concina en un restaurante, la comida y su preparación tendrían un gran protagonismo o al menos algo de protagonismo, sin embargo, esto no sucede en ningún momento de la serie. El tema alimenticio es un tema totalmente secundario sino terciario que aparece casi por obligación al desarrollarse el anime en un restaurante. En cambio lo que parece esté anime es estar principalmente creado para aquellos que sueñan con caballerosos hombres mayores.
Sinceramente no es una serie que me halla atrapado, y no por la diferencia de edad entre la protagonista y el foco de su amor, sino porque ficho foco de amor parece no tener sangre en las venas, no he llegado a entender la actitud de los personajes ni sus verdaderas motivaciones, ni siquiera recordaba el nombre de todos ya que me resultaban un poco superfluos e incluso en ocasiones incensarios para que la trama continuase. Comprendo que la serie se crease para conocer en profundidad a cada personaje, sin embargo en mi opinión no profundizan lo suficiente o lo hacen de una manera carente de real emoción. El único momento que me ha emocionado es la escena final en la que la madre confiesa que la protagonista es su hija, algo que ya me olía, pero quitando eso super plano.
En resumen, no es una anime que recomendaría ver a no ser que te haga feliz ver hombres mayores en pantalla.

Nada más comenzar el anime se aprecia una gran similitud al "detective Conan", sin embargo el nivel de los casos es bastante inferior, mientras que en el "Detective Conan" aparecen varios personajes en cada caso y todos tienen motivos para cometer el crimen, haciéndote cambiar de opinión con cada pista que te ofrecen sobre el verdadero culpable, en este anime tan solo se muestra la presencia de uno que tiene que se por narices el culpable, por lo que el elemento sorpresa se pierde totalmente, cosa que lo hace a veces un poco aburrido. No obstante, el hecho de que aparezcan elementos sobre naturales le da un toque curioso a la historia.
Por otro lado, la trama que hay por debajo de cada caso, es interesante y me hubiera gustado un mayor desarrollo en ella, ya que al finalizar la temporada se queda inconclusa. Desarrollo que si que experimentan los personajes protagonistas a lo largo de toda la serie, sobre todo en la protagonista femenina se ve un cambio realmente sustancian entre su actitud al inicio de la serie y al final.
Una serie que no esta hecha para pensar sino para pasar el rato si tienes nada que hacer.

"Death mount death play" puede ser considerado un isekai solo que a la inversa, es decir, que un ser de un mundo donde la magia existe se reencarna en nuestro mundo, o al menos eso es lo que parece en un principio.
Por causalidad el protagonista, que tan solo desea una vida de paz, reencarna en un cuerpo que alguien quiere ver muerto y, por lo tanto, entre que no entiende mucho el mundo actual y que no sabe donde están o si existen siquiera esos enemigos, al pobre lo tienen liadísimo. Eso sí, él tiene una parsimonia en el cuerpo... que ya quisiéramos todos, supongo que poder utilizar ciertos "poderes" que no perdió durante su renacer da esa tranquilidad.
Sin embargo, lo que en un principio parecía ser tan solo un "intenta no morir y consigue dinero para vivir", se convierte en una especie de culebrón en el que todo esta relacionado con todo y nadie es inocente, absolutamente nadie, al menos de los personajes con los que se relaciona el protagonista, el pobrecillo.
Lo que más me ha flipado es el lio que monta el protagonista por utilizar sus poderes en un mundo que lo considera cosa de la ficción, aunque también es cierto que hay ciertos personajes con habilidades realmente fuera de lo común.
Aunque hay algunos capítulos durante la temporada que pueden parecer un poco lentos, no se hace pesada para nada y sientes mucha curiosidad por seguir viéndola u así descubrir alguno de los misterios que se presentan. Esta primera temporada yo la calificaría como una introducción al meollo de la cuestión que es justo dónde termina, no obstante es realmente entretenida de ver, así que espero con ansia la siguiente parte de la temporada.

Este es un anime en el que al inicio te esperas que sea de una manera, pero ocurre algo que da un giro de ciento ochenta grados y te cambia todo lo que podías haber empezado a elucubrar.
Comienzas siguiendo a un ginecólogo fan de una idol que trabaja en un pueblucho alejado de la mano de Dios. Por casualidades de la vida termina siendo el médico de su foco de interés y permanece con ella, aunque de una manera inesperada para él. La temporada engancha desde el primer instante y te insta a no parar de verla simplemente por el hecho de saber que se le va a ocurrir ahora hacer al protagonista o hasta donde va a ser capaz de llegar para conseguir lo que quiere. Y mientras le seguimos nos encontramos algunas de las caras más oscuras del mundo del espectáculo, o de la fama, así como lo que puede llegar a provocar el mal uso de las redes sociales.
Es un anime que me ha dejado con muchas ganas de que saquen la segunda temporada, he llorado, he reído, me ha mantenido en tensión y no puedo esperar a seguir viéndola. Muy recomendada.

Aunque en un primer momento este anime me estaba gustando, llega un punto en que las situaciones están tan puestas apropósito para que el protagonista se luzca que resultan extremadamente predecibles y por tanto casi aburridas.
El anime comienza como el todos los "Isekai" con la muerte del protagonista en su tierra natal y su renacimiento en un nuevo mundo, además como en la mayoría renace como un ser extremadamente poderoso. Hasta ahí todo bien. Sin embargo, lo que me falla es la actitud del protagonista, antes de reencarnar parece bastante serio por lo que al renacer me imaginaba un personaje "profundo", pero por el contrario nos presentan a un niño que no para de disculparse porque, a pesar de haber crecido allí, siempre se "pasa" llevando a cabo sus hazañas, cuando debería conocer qué es lo normal si lo que quiere es pasar desapercibido tal y como parece. Además tiene la mala costumbre de "hacerse el despistado" y vaya que casualidad que eso provoque situaciones "cómicas" o al menos es lo que creo que se pretendían crear. Por otro lado, la relación que se establece entre su anterior vida y la nueva me parece original, no me la esperaba, fue una sorpresa agradable entre tanta predictibilidad. También destacar que el progreso de crecimiento del protagonista desde los tres hasta los diecisiete está muy bien dibujado.
Con todo, es un anime que se deja ver, pero que al final no deja un impacto demasiado grande en la memoria.

La premisa principal se presentaba en esta serie me parecía interesante y además siendo tan solo diez episodios no tendría que habérseme hecho pesada de ver, pero desafortunadamente así ha sido. A la mitad de la temporada aquello que daba fuelle a la historia de repente desaparece y todo lo que le sigue es una sucesión de eventos que parecen estar enfocados a rellenar horas.
Al inicio las acciones de los personajes principales están bien en el sentido de que son coherentes a lo que pretenden mostrar y hacerte sentir, de hecho he llegado a "pasarlo mal" junto con la protagonista por los desplantes del marido. Sin embargo, llega un punto en el que todo se acelera, te dicen que han pasado x meses desde la boda, pero en acciones en la pantalla no se aprecia para nada, de hecho, el cambio de actitud entre los protagonistas es súper brusco y no parece realista, al menos desde mi punto de vista. No obstante, es a partir de capitulo seis dónde todo me sobra, exceptuando el final del capitulo diez, que presenta un cierre total de la serie.
Por tanto la mitad de la serie merece la pena, si, para un rato que no tengas nada que hacer. Sin embargo, me sobran cuatro capítulos y medio que me han hecho cogerle un poco de manía a la serie.

El empiece de la serie me parece un poco flojo y el triángulo amoroso que te presentan no hay por donde cogerlo , con todas las visiones que tiene ella del futuro de su buena relación con su jefe, en que cabeza coge que vaya a elegir al otro tío .Sin embargo, a pesar de tener notas fantasiosas me parece una relación amorosa bastante realista, con todos los altibajos que una pareja real puede tener, no extremadamente idealizada como en otras series y con un final relativamente abierto, pero bastante bien cerrado.
Es una serie que bien mirado tiene un poco de todo, romance en su mayor parte, pero también se ve acción, fantasía, misterio y drama. Es verdad que hay veces que pasan cosas en las que piensas, vaya que conveniente, no obstante dentro de lo que cabe no es una serie mal llevada y exceptuando el final del último capítulo, la relación amorosa principal me hace pensar en chispas.
Por lo tanto, no la recomiendo en exceso, pero para una tarde sin ningún plan es aceptable.

El sabor del destino es una serie que en un primer momento puede parecer un poco "tonta", de comedia fácil o absurda, pero tiene un trasfondo más profundo de lo que esperaba. El tira y afloja constante entre los dos protagonistas, la ceguera de ambos en ciertos momentos y los entresijos de la corte y sus miembros proporcionan un buen entretenimiento.
Cuando comencé a verla no pensé que me encariñaría con los personajes ya que su forma de actuar me parecía, como ya he comentado antes, un poco absurda, sin embargo, me ha sido imposible evitar las lagrimas al finalizarla.
En resumen, no es de las mejores series de este género que he visto pero no me ha resultado desagradable verla, me ha provocado risas y lágrimas y para momentos muertos en los que no sepas que hacer me parece una buena serie que ver, eso si solo para aquellos a quienes el humor absurdo no les moleste.