Redactada: 2022-11-13
Sin ser un fan del género western, logro apreciar todo el homenaje que hay por tras la parodia que hace Mel Brooks.

El humor, cuyo absurdo alcanza el nivel de disparate hacia el final de la cinta (aunque por la manera en que va escalando no rompe la suspensión de la incredulidad) y que está repleto de anacronismos, ayuda a aguantar una historia que resulta de lo más cliché dentro del western (y casi diría que de la acción en general): héroe llega a sitio para protegerlo de una banda de maleantes.

Eso sí, parte de su humor no ha envejecido nada bien, y el excesivo uso de la N-Word se acaba haciendo pesado; aunque por otra parte, estamos ante una cinta con casi cincuenta años y he visto películas con un cuarto de sus años que resultan muchísimo más ofensivas (y menos graciosas) en su manera de intentar construir la comedia.

Los personajes son carismáticos, aunque en general funcionan más como el vehículo para mover un gag del film que personas. Aunque la amistad entre Bart y Jim se construye de manera que sin ver demasiadas interacciones entre ambos, te creas que dos tipos que se acaban de conocer se hagan tan amigos.

En definitiva, una divertida obra del género western, que si bien no ha envejecido del todo bien en cuanto al humor, sigue manteniendo el tipo.
Guion
4 ✮
Banda sonora
4 ✮
Interpretación
4 ✮
Efectos
3 ✮
Ritmo
5 ✮
Entretenimiento
5 ✮
Complejidad
3 ✮
Sentimiento
3 ✮
Duracion
5 ✮
Credibilidad
3 ✮
Fotografía
3 ✮
Dirección
5 ✮

Valoraciones en tu crítica:

Comentarios

Todavía no hay comentarios

Otras críticas de Sillas de montar calientes