Crítica de Mensajero del futuro por Danie1

Si Waterworld decía que no era tan mala como la pintan, Mensajero del Futuro si es bastante más regulera. Y es que, de vuelta a un mundo post-apocalíptico, pero esta vez sin estar cubierto de agua, quien tiene que salvar a la humanidad son los carteros, tocate los hue***. Vale, no son carteros como los de aquí, es más un rollo Pony Express del Oeste, pero con adolescentes, cazadoras bombers y con gorras hacía atrás, y que conste que no tengo nada en contra del Pony Express ni de que sean adolescentes, me encantaba la serie de Jóvenes Jinetes, pero esto no tiene ni pies ni cabeza.

Aquí resulta que Costner es un superviviente que camina con su burro por el mundo, pero en una de esas es reclutado por una especie de ejército que intenta mantener el orden con mano dura en los pocos asentamientos que hay, quizás lo más interesante de la película, ese ejercito con sus normas que intenta que no se repitan errores pasados. Pero consigue escapar, llegar a uno de esos poblados y como lleva la indumentaria de un cartero que pillo a un muerto le dejan pasar sin más! Y se pone a dar cartas de hace años y la gente tan feliz. Luego resulta herido y acaba en una choza en la montaña en plan ermitaño con la chica que le gusta y cuando se acaba el invierno funda la filial de correos en el oeste en plan ejército para luchar contra los golpistas. Un argumento muy loco.

Al final le acaban haciendo una estatua, 30-40 años después?, con todo ya reconstruido como si nada y ahí todos con americana y traje, que dices, pero si hace unos pocos años eso era el salvaje oeste post-apocalíptico y ahora está como si nada? Venga ya! De más a menos, no está mal hasta que se hace cartero, pero acaba siendo una ñoñería.