Crítica de La máscara por Nuemiel

En ocasiones, cuando uno vuelve a ver una película después de muchísimos años, llega a comprender por completo su contenido (de niños muchas ironías se nos escapan) y sucede que se disfruta incluso más. ¡Eso es exactamente lo que me ha pasado!

La película es tronchante, desternillante, descojonante, muchísimos adjetivos en el ámbito de la diversión; puedes verla diez veces que no pararás de reírte con los chistes y sobre todo los insuperables gestos de Carrey, que hace todo un alarde de su capacidad cómica. Además, los interesantes efectos visuales que se muestran y que dan rienda suelta a la fantasía, fueron nominados a un Oscar.

Jim Carrey es el principal protagonista de la película, un hombre tímido y patoso al que todo el mundo toma el pelo, pero que, tras ponerse la máscara, su personalidad cambia radicalmente hasta poder proyectar sus propias fantasías y manipular a la gente a su antojo.

Peter Greene será la otra cara de la moneda al interpretar a Dorian Tyrell, un tipo sin escrúpulos que desea convertirse en el mayor criminal de la ciudad. Y Cameron Díaz salta a la gran pantalla en su primera película realizando el papel de Tina Carlyle.

La banda sonora tiene una gran importancia en la película. Es más, las mejores escenas son aquellas en las que veamos a Jim Carrey con la máscara puesta bailando al ritmo salsero de canciones como Hey Pachuco o Cuban Pete, que nos hacen disfrutar muchísimo.

Por último, os comento que la película, al igual que casi todos los superhéroes que pululan ahora, está basada en un cómic creado por Dark Horse Comics. La versión original es bastante diferente a la película. Por ejemplo, en el cómic la máscara es originaria de los indios amazónicos mientras que en la película se comenta que es de los países nórdicos.

La Máscara es una gran película que no ha pasado a la historia, pero es ideal para divertirnos y descubrir que no hay que esconder nunca la personalidad de uno mismo, sino mostrarla tal y como es.

Saludos ;)