Crítica de Equipo a la fuerza por Pinwi

Equipo a la fuerza (The replacements) es una comedia deportiva protagonizada por Keanu Reeves y Gene Hackman.

Una huelga de jugadores deja a los Washington Sentinels sin plantilla para jugar los cuatro partidos que faltan para los playoffs, por lo que tendrán que recurrir a semi profesionales para cubrir esas plazas.

Me gustaba mucho esta película en mis tiempos mozos, y eso que aun no entendía el fútbol americano (tampoco es que ahora sea un experto).
La película se desarrolla con un tono cómico tontorrón, sin tomarse demasiado en serio en ningún momento. Los jugadores a los que recurren son dos guardaespaldas gigantescos y un luchador de sumo para la defensa, un policía que es un psicópata, un irlandés que en su día tiraba muy bien las faltas en el fútbol europeo,... y algunos que en su día llegaron a profesionales, pero que por lo que sea, no han seguido jugando.

El reparto cuenta con algunas caras reconocibles, algunos que ya lo eran y otros que han conseguido hacerse su hueco y por los que a lo mejor merece la pena repasar la película como Jon Favreau. Keanu no está mal, encaja, y Gene Hackman, junto a Las Seductoras, seguramente sea la película en la que más se ríe de toda su carrera, lo cual también ayuda a dejar claro que es una comedia maja que no pretende otra cosa que verla con buen rollo.

Fuera de lo que son los jugadores en sí, tenemos a las animadoras, con un tono similar de humor, pero aquí nos meten la pastelada romántica que amenaza con rebajar la cinta a ñoñada adolescente, y aparte los jugadores en huelga que hacen las veces de malotes pandilleros con los que tienen alguna trifulca.

Al final el resultado, es lo que he dicho, una película que no te puedes tomar en serio, con sus pros y sus contras claros, que sobre todo podrá parecer más simpática a quien tire del factor nostalgia.