Little Monsters es una película de comedia y zombies, protagonizada por Lupita Nyong'o.

Un músico fracasado, se une a la excursión de su sobrino por el único motivo de que su profesora le ha hecho tilín, sin esperar que el lugar al que van se verá invadido por zombies.

En una película mucho más cómica de lo esperado en su guion, el tema de zombies tarda quizá demasiado en arrancar, y una vez que arranca, salvo en contadas ocasiones es más bien secundario, dejando paso a la comedia "dialéctica" por así decirlo, e incluso a un amago de romance, que como excusa para apuntarse a la excursión está bien pero que luego sólo ralentiza un ritmo ya de por sí lento. Además, la película aporta al clásico imbécil que de vez en cuando es típico en estas películas, que también estorba más que aporta.
La película tiene sus puntazos de vez en cuando, pero en su conjunto se queda floja, para un domingo por la tarde tontorrón, como mucho.

Una película distinta de zombis, meten algo nuevo e innovador que es incluir niños de preescolar, con su forma de ser tan particular de los niños de tan poca avanzada edad. Esta entretenida y algo graciosilla, te hace sacar una sonrisa. Me gusta la forma de interpretar las canciones, algo típica la selección, pero estamos hablando de que están dirigidas hacia niños y no pueden ser muy rebuscadas.

No me gusto el papel de Josh Gad, quizás por su guion (cosa que no es culpa suya, excepto por aceptarlo). Destacan en su papel Lupita Nyong'o y Alexander England.

Recomendada, pero dudo que la veas mucho más.

Cuando en una película de zombies hay más canciones cantadas, que desmembramientos, es que algo falla. Diréis que es que pone comedia en el género, pero hay comedias y comedias, que en Braindead o Zombies Party te partes y ves una buena cantidad de sangre, pero es que en esta ni sangre ni nada, porque creo que en toda la película no me reí ni una sola vez. Aunque salen zombies bien caracterizados, es blandita, blandita. Decepcionante para los buenos comentarios que tenía.

Little gamberrada que piensa que mezclando comedia, zombis, niños y romance nada puede salir mal, pero que se queda en tierra de nadie pues le falta audacia para llevar el humor al lado donde la risa se vuelve incómoda y le sobra convencionalismo para aburrir en demasiadas escenas de la película.
Solo recomendable para "matar" el rato con alguna sonrisa que no esconde unos cuantos bostezos.