Otro remember ochentero para apelar a nuestra nostalgia. En este caso, le toco al bueno de Axel Foley, que sigue con su socarronería intacta y al que los años no se le notan mucho, al contrario que Rosewood y Taggart, sobre todo a este, que ya no están para estos trotes. Y es que no solo tiran de ellos para que el remember sea completo, si no que muchas caras conocidas de la primera tambien salen aquí. Para darle un poco de sabia joven, tenemos a Joseph Gordon-Levitt y a Taylour Paige ***contenido con spoilers*** .

Esta 4ª entrega, es una entretenida cinta de acción, aunque en algunos momentos le falta potencia, con los típicos chistes de Eddie Murphy, que se deja ver, pero que recuerda mucho a la primera. Por suerte, es bastante superior a la 3, pero se queda un poco por debajo de las dos primeras, que son las buenas. Para pasar el rato.

Otro remember ochentero para apelar a nuestra nostalgia. En este caso, le toco al bueno de Axel Foley, que sigue con su socarronería intacta y al que los años no se le notan mucho, al contrario que Rosewood y Taggart, sobre todo a este, que ya no están para estos trotes. Y es que no solo tiran de ellos para que el remember sea completo, si no que muchas caras conocidas de la primera tambien salen aquí. Para darle un poco de sabia joven, tenemos a Joseph Gordon-Levitt y a Taylour Paige ***contenido con spoilers*** .

Esta 4ª entrega, es una entretenida cinta de acción, aunque en algunos momentos le falta potencia, con los típicos chistes de Eddie Murphy, que se deja ver, pero que recuerda mucho a la primera. Por suerte, es bastante superior a la 3, pero se queda un poco por debajo de las dos primeras, que son las buenas. Para pasar el rato.

Otro clásico de los 80 que vuelve a una época de exceso de consumo fílmico y con pocas ideas. Y yo me pregunto, ¿Era necesaria? No, pero qué bien entra.

El inicio es nostálgico. Axel Foley de paseo, una estética preciosa y una BSO con marca propia. Después una pildorita de lo de siempre, una persecución llena de destrucción y comedia. Y hablando de comedia, la risa de Eddie Murphy es de feliciano total, qué buen rollo transmite.

Después tenemos la clásica obviedad de siempre, quien es el malo, más momentos cómicos como el método para conseguir refuerzos, y algo que insertan en las películas de ahora, un trasfondo familiar y de redención con el pasado, algo que lo único que hace es alargar la película.

Algo con lo que discrepo totalmente, la culpabilización del padre por todo. Es cierto que padre e hija tienen dos roles complementarios y asimétricos, pero culpar de todo a una única persona cuando había más variables como la madre me parece simplista y de quitarse responsabilidades, al menos cuando uno ya es adulto. Es cierto que al final amaina toda esta tormenta de culpa y se acepta parte, pero lo que transmite no me gusta.

En resumen, una película que cumple con su misión que es la de entretener porque te distrae de tus cosas durante el tiempo que dura, que no es poco tiempo. A la vez esta duración le penaliza porque al incluir más elementos le roba la esencia de sus predecesoras y no tiene el mismo impacto en el espectador.