A chinese odyssey Part two: Cinderella es la segunda entrega de esta saga de humor absurdo y fantasía oriental, protagonizada por Stephen Chow.

La película empieza justo donde acaba la anterior entrega. Joker trata de viajar en el tiempo para resolver cierto suceso ocurrido en la primera parte, pero se lía un poco y no sale como pretendía, aunque igualmente puede sacar provecho de su nueva situación.

Pues en esta nueva entrega cambiamos un poco de tercio, sobre todo en cuanto a la cantidad de humor y desarrollo de personajes.
Seguimos teniendo humor absurdo, pero de forma más puntual en una película que prescinde de sus personajes más ridículos, en beneficio de algo de desarrollo de personajes y de algo más de historia.

Creo que el haber visto la primera entrega y esta tan seguido, me ha ayudado a ver con mejores ojos esta segunda parte. En la primera parte me desbordó un poco las partes más ridículas, por lo que he agradecido un humor algo más serio en esta entrega. De no ser así y en caso de haberlas distanciado, esta entrega seguramente me habría acabado aburriendo un poco en ciertos puntos intermedios.

Aun así, mantiene el tono desenfadado en sus diálogos, el tono visual, con ese encanto en sus limitados recursos, pero sobre todo nos ofrece un tramo final con el que me lo he pasado bien, y por favor, que alguien me diga que también ha visto ***contenido con spoilers***

Una continuación con ciertos contrastes con su predecesora, que hace que siga estando bien haberse dejado caer en esta trilogía.

Mi crítica a este film podría ser simplemente un copypaste de la crítica a su primera parte, ya que la mayor parte de lo que dije allí sigue valiendo, a excepción de que la épica queda al servicio de la comedia, ya que aquí esto cambia.

En este caso, comedia y épica quedan bien balanceadas, de hecho, por momentos la comedia es esporádica como se suelen encontrar en otras cintas de acción y aventuras, y es algo que funciona bien porque al ser sobre todo un humor que gira en torno a ambos personajes interpretados por Stephen Chow (y algunos secundarios algo ridículos), hace que el mundo se sienta más serio en comparación.

En lo que respecta a la trama en sí, como cierre de la historia (porque esto lo es, por mucha tercera parte que haya) funciona extremadamente bien porque juega con las expectativas del espectador, y siendo sobre todo una historia de viaje en el tiempo sabe trabajar con este elemento haciendo que volvamos a ver una escena del film previo pero ahora desde el punto de vista del protagonista que puede estar en directo en el momento, así como el plantear cómo se puede explicar que vienes del futuro (incluso en un mundo con demonios e inmortales).

En definitiva, la mayor parte de mi crítica previa sigue valiendo para esta, pero si el humor es algo que no te acabó de gustar, esta entrega tiene mucho menos de eso. También se siente menos infantil en algunos aspectos (como la violencia) o ese giro que hacen respecto a ***contenido con spoilers*** , cambio poco habitual en esta clase de historias.

Así que esta es la clase de obra que hay que ver con la mentalidad correcta, entendiendo tanto que no se trata de una película de Hollywood, con lo que los efectos así como el estilo cinematográfico se puede sentir ajeno; como que no es Wuxia u otros géneros más típicos de las artes marciales, con lo que los combates aunque interesantes por el uso de poderes, no se centran en las coreografías de los actores, y que sigue teniendo elementos cómicos bastante absurdos que a veces puede parecer que rompen el ritmo si olvidas de qué obra es secuela esto.

Al contrario que varios compis esta segunda parte me ha parecido superior casi en todo a la primera, dicen que segundas partes no son buenas en general bueno esa es una opinión en este caso tengo otra bien distinta.
Cierto que el comienzo de la película es un poco repetitivo y funciona a modo de resumen quizá más resumen del necesario para poner en contexto a esta segunda y eso sumado a los viajes temporales y repeticiones puede no gustar tanto, otro recorte es el humor viniendo de la primera se nota que toma otro tono se vuelve más serio mas recatado pero me ha gustado que se vuelva más ligero y no tan cargante.
En el apartado visual no me resulto como en la primera quizá no abusaron de ciertos efectos de luz y de color, se me hizo más agradable su visionado con tonos menos saturados y más limpios.
En el diseño de sonido sigue al nivel de la primera incluso me pareció superior esta muy logrado los efectos de los golpes para darle comicidad y las voces bien capturadas.
Creo que es conveniente verla seguido tras la primera y no dejar pasar el tiempo pese a que haga un resumen ya que desconectar te haría verla probablemente con otros ojos a esta parte.

Segunda entrega de esta odisea basada en la leyenda fantástica del folclore chino sobre el Rey Mono. Empieza exactamente en la misma escena donde terminó la anterior. Una continuación que, quizás, se apoya menos en el humor estúpido (sin que deje de ser uno de sus ingredientes clave) y pretende seguir hilando un poco más de la historia. No puedo mentir, la trama se me sigue haciendo difícil de seguir. Puede ser que sea porque las narraciones no son tan lineales en la ficción china, pero es caótica. También tiene el romance mucho más en primer plano (bueno, el romance a su manera, claro).

Sigue siendo una historia entretenida con un montón de escenas locas de acción y artes marciales con trazos de comedia física y escatológica. El Rey Mono es un personaje bastante loco y trepidante, no para de moverse y actuar de forma absurda, así que eso contribuye a un mayor dinamismo. Me ha hecho gracia el momento "onlyyy youuu" sacadísimo de la manga y lo mucho que odia todo el mundo al Monje de la Longevidad por lo mucho y enrevesado que habla. Para mí es una aventura divertida, aunque siento que toda la trama está terriblemente embarullada y yo me pierdo.