Campeonex es una película cómica, protagonizada por Elisa Hipólito.

Unos años después de ser unos 'Campeones', este grupo se volverá a reunir para competir una vez más, esta vez en atletismo, entrenados por una joven novata pero con mucho entusiasmo.

Pues vamos a ver, creo que se ha quedado lejísimos de la primera película. Una secuela que cambia de protagonista principal y de deporte, aunque mantiene al grupo con algunos fichajes.
Uno de estos fichajes, Brianeitor, acaba siendo uno de los pilares fundamentales de esta historia, y resulta que el muchacho en la vida real es streamer o youtuber o lo que sea, no acabo de manejarme bien en ese mundo, y por aquí ha venido gran parte de lo que no me ha convencido en esta cinta, dejando claro que el muchacho me parece un crack, pero es lo que hace lo que no me ha encantado.

La película, aparte de que no tiene la chispa que tuvo la primera entrega, intenta (y consigue en buena medida) mantener el encanto, pero nos sumerge en el mundo del "atletismo" (o así lo llaman), concretamente en un deporte que no lo vi venir, a pesar de que nos dan varias pistas. No soy carne del mundo moderno de internet, de los streamers, de jugar online contra chopocientas personas, ni tampoco de gente como Ibai Llanos (y en esta película tenemos a dos pseudo copias) , los respeto y tal, pero francamente lo que venden no es para mí, con lo que toda la competición estaba mirando la hora a ver si faltaba mucho.
Con su intención de orientarla a un público nuevo, a mí me han sacado de la película.

Pero al margen de la competición, y aunque el reparto siga siendo majete (me encantan Benito y Paquito), a esta película también le ha faltado gracia (y dura dos horas), tiene sus puntazos, pero le falta frescura, y tiene muchas situaciones que me han parecido demasiado forzadas. Me da la impresión de que sobre todo han querido aprovechar el éxito de la primera para hacer esta secuela, que oye, están en su derecho, pero me gustaron más las formas en la primera parte, conforme avanzaba esta película se me iba haciendo larga.