Madam C. J. Walker: Una mujer hecha a sí misma

La serie está basada en la biografía "On Her Own Ground" , pero por la sinopsis esperaba sudor y lágrimas, así como algunos flashbacks, búsqueda del alma y secretos del éxito. Pero Netflix idealizó el personaje e hizo una serie demasiado blanda, no lo suficientemente íntima y la que le falta la garra de la biografía. Al final, me sentí como si estuviera viendo un buen telefilme de domingo por la tarde, pero con un buen reparto. Algunos de los actores son de primera categoría: Octavia Spencer, que lleva el peso de la serie, pero también Blair Underwood, que interpreta al marido. Me gustó especialmente Garrett Morris como el humano y divertido abuelo que representa un poco de sabiduría. Las relaciones entre la Sra. CJ Walker y los demás personajes, CJ Walker, Ransom, Lelia, están muy bien hilvanadas. Los escenarios están muy bien logrados para esta serie y nos sumergen de principio a fin. El vestuario, los peinados e incluso los exteriores. En definitiva, estamos en la América de la primera guerra mundial. La mini-serie tras uno o dos buenos episodios, todo se viene abajo y acabamos con una serie torpe que menosprecia un poco al espectador. Las libertades que se permite el guión sobre la vida real empañan el tema y la historia. La biografía puede haber inspirado a mucha gente, la bonita historia que pone de relieve todas las dificultades a las que puede enfrentarse una mujer en el mundo del emprendimiento y, por desgracia, ¡sigue estando de actualidad! Y si eres negra, pues desgraciadamente se pone peor.

"Madam C. J. Walker: Una mujer hecha a sí misma", es una miniserie que pone en el centro de la historia a una de las figuras más influyentes en la industria de la belleza afroamericana y en el mundo empresarial. Madam C.J. Walker no solo revolucionó el cuidado del cabello para las mujeres negras, sino que también rompió barreras como la primera mujer millonaria hecha a sí misma en Estados Unidos.

Esta serie de cuatro episodios nos sumerge en la vida de Sarah Breedlove, más conocida como Madam C.J. Walker, quien tuvo que superar una serie de obstáculos personales y sociales para construir su imperio. Desde la traición y la competencia despiadada hasta la discriminación racial y de género en una época donde las oportunidades para las mujeres negras eran prácticamente inexistentes. La historia de Walker es un testimonio de perseverancia, ingenio y determinación.

La serie cuenta con la imponente presencia de Octavia Spencer en el papel de Walker. Su actuación es el alma de la historia, transmitiendo con naturalidad la fuerza y la vulnerabilidad de una mujer que desafió todas las expectativas. Es refrescante verla como protagonista absoluta, capturando la ambición de Walker con frases como su deseo de ser tan poderosa como Carnegie o Rockefeller.

Visualmente, la serie es espectacular. Los escenarios y el vestuario nos transportan al final del siglo XIX y principios del XX, destacando la opulencia de la alta sociedad negra de la época. Además, Self Made no solo se centra en el éxito empresarial de Walker, sino que también aborda problemáticas sociales profundas como el colorismo dentro de la propia comunidad negra. La rivalidad con Addie Munroe, interpretada por Carmen Ejogo, es un reflejo de cómo el cabello y el tono de piel pueden influir en el trato y las oportunidades de las mujeres negras.

A nivel narrativo, Self Made tiene un ritmo ágil y atractivo, pero no está exenta de defectos. Algunas escenas de fantasía intercaladas en la trama principal se sienten innecesarias y distraen más de lo que aportan, especialmente en el primer episodio. A pesar de esto, el mensaje de la serie y la fuerza de sus protagonistas logran compensar estos pequeños fallos.

Aunque no es perfecta, su impacto es innegable y deja una huella importante en el espectador.

Mini serie basada en la historia de Madam CJ Walker (compañia de productos de belleza para mujeres), que no está mal del todo.

Es una historia sencilla, llena de lucha por parte de la mujer y llena de rivalidades.. Y ahí empieza unos cuantos peros: todos los capítulos siguen una estructura bastante igual, donde siempre le pasa algo malo pero que acaba resolviéndolo.... es decir, tengo la sensación en que todos los capítulos están así y también, no tengo sensación de avance de su empresa, si, se nota que llegado a un punto es una empresa más seria peeeero... no he tenido sensación de ello .

Y es que, al final, este tipo de series para mi gusto, aunque no este mal y sea entretenida, no la recomendaría más allá que para el público estadounidense debido a que es una empresa de su zona, donde fuera de ella, no se conoce absolutamente nada de su historia. Para mi, es como si en Estados Unidos, viesen una historia de la creación de Telefónica, por ejemplo.. a lo mejor les gusta, pero no entenderían que puede significar al 100% su origen e historia.