Críticas de La hora del miedo

La hostia, qué cuesta arriba se me ha hecho, hasta agujetas siento...

Tiene un ritmo que va más allá de lo soporífero y verla pensando que se trata de una película de terror (como ha sido mi caso) no ayuda absolutamente nada porque te pasas la película entera esperando algo que jamás en la vida va a llegar. Tampoco ayuda una carajo que todo el desarrollo de la misma sea en el desvencijado apartamento heredado de la prota.
Por otra parte, la interpretación de Naomi Watts me ha parecido aceptable al igual que la ambientación del film, transmitiendo juntos una sensación bastante asfixiante.

La conversación con el Midnight Cowboy llegó a producirse? Es más, llegó a producirse siquiera el encuentro??

La hora de Naomi Watts. Totalmente de acuerdo!
La hora de Alfred Hitchcock. Se ven muchas costuras del maestro.
La hora del principio y el final. Eso me llevo porque el nudo es nulo. Pero claro, Dirección pensó que teniendo a la Watts como starlet era suficiente con entregarle un papel en blanco para que ella lo rellenase.
Pero La hora del miedo?????? En espacio y cantidad decepcionan.
Somos únicos poniendo titulines.
Pero claro, La hora del lobo ya lo tenía cojido un tal I. Bergman desde antes de que yo naciera.
Agorafobia, terror nocturno, claustrofobia, de todos los males que pretende ilustrarnos ninguno se sustenta lo suficiente para hacer creíble la historia que se nos cuenta.
Y reiteró, solo una mugrienta y desaliñada Naomi Watts salva el espectáculo.

Esta película de suspense no vale nada; la trama avanza lenta, sin llegar a ninguna parte y dejando un montón de cabos sueltos... pero, ¿y si este film no es de suspense?

El trasfondo es el verano del 77 donde precedida por David Berkowitz, más conocido como El hijo de Sam, la criminalidad neoyorquina estaba en auge, todo ello como una olla en ebullición que culminaría en «un acto de dios» (como lo llamaría la compañía Con Edison) en la que tres rayos golpearían distintas subestaciones eléctricas provocando un apagón histórico que duró veinticuatro horas.

Sumado a esto, a lo largo del film nos acompañará el incesante zumbido del timbre tras el que nadie responde a la protagonista, creando en ella (y en nosotros) una sensación extremada de paranoia.

Además, todo aderezado de una construcción de la historia situada en un único espacio (que por las circunstancias en que se presenta es claustrofóbico) y con pocos personajes, siendo la mayor parte del metraje solamente con su protagonista.

¡Claramente es una película de suspense! ¿No? Pues lamento decirte que si has mirado esto como un film de suspense no solo has perdido el tiempo sino que has dejado pasar la oportunidad de apreciar esto como lo que realmente es: un drama.

Porque sí, esta no es la historia de los altercados derivados de los actos del asesino del calibre 44 o de la criminalidad neoyorquina, así como tampoco lo es sobre el acoso que sufre la protagonista a manos de un desconocido. Es la historia de una mujer que sufre un trastorno que le provoca ansiedad y agorafobia, que además afecta su vida convirtiéndola en una ermitaña con el contacto justo con el resto de seres humanos, con una tendencia al síndrome de Diógenes y problemas financieros (aunque en una sociedad capitalista no descarto que esto haya provocado el resto).

La cosa está en que si te paras a mirar cómo se presenta la trama ves que no puede tratarse de un thriller: tal vez no al comienzo, pero bastante pronto queda claro que la trama del acosador no avanza y esto lleva a la cuestión de «¿dónde quiere llegar el film?», porque esto es habitual en el drama (a diferencia del suspense) en el que realmente es complicado, por no decir imposible, asegurar dónde pretende llegar la trama. Incluso si estás ante un biopic te costará saber dónde la trama decidirá deternerse, ¿será a la muerte del personaje (en caso de ser uno ya fallecido)? ¿Tras un evento importante?

Esto tal vez se cumpla menos para obras que giran en torno a un evento concreto, como es el caso de Hidden Figures que gira en torno a las mujeres afroamericanas que fueron vitales para que la misión del Apolo 11 saliera bien. Pero aquí es difícil saber dónde pretende llevar la trama... El tema del timbre no avanza, pero podría hacerlo de cara al final; la protagonista tiene el pelo largo y oscuro, tal vez vaya a ser una víctima del Hijo de Sam; tiene problemas financieros, puede que por ahí vayan los tiros...

Por supuesto que a medida que avanza la cinta es más fácil saber por dónde pretende llegar, pero todavía incluye ciertos momentos de desconcierto ante las posibilidades ( Freddie desaparece tras llevarse el manuscrito, ¿ha muerto o ha escapado con el dinero?, sin importar cual de las dos sea, ¿cómo va a sobrevivir la protagonista sin ese pago? ), lo que no lo hace tan previsible como un thriller.

Aunque por supuesto sigue teniendo varios componentes de thriller psicológico, eso no se puede negar, pero como digo es más un aderezo para dar sabor que el plato en sí.

El mayor acierto del film es la actuación de Naomi Watts que me parece sublime y muestra perfectamente el comportamiento de alguien que sufra de ansiedad y todos los trastornos que sufre la protagonista, que va resolviendo sus problemas a base de esfuerzo.

La mayor pega sin duda es que, aunque no se siente tan lento por ser un drama, sigo notando el ritmo demasiado sosegado para mi gusto, sin avanzar mucho en la trama, que no sería problema si eso sirviera para la construcción del personaje (o su relación con el resto), pero con pocos momentos claves se construye todo esto, dejando lo demás como un cierto relleno.

En definitiva, si esperas una película de suspense, no lo hagas, porque lo que verás es una absoluta mierda, pero de la misma manera que si te pones el film esperando una comedia.

Si en cambio miras esto como lo que es, un drama, en el que los elementos terroríficos no construyen un misterio, sino al propio personaje, puedes llegar a apreciarlo más; es algo lento y tal vez haya elementos que no lleven a nada, pero es extremadamente disfrutable.

‧☀︎° The Wolf Hour °☀︎‧

Situándonos en el Bronx, durante el verano sofocante del 77. Dónde los conflictos se apoderaban de las calles y los crímenes del asesino seria «David Richard Berkowitz» – Apodado como “El hijo de Sam” o “El asesino del calibre 44” – atemorizaba a toda la ciudad a través de los medios de comunicación. En medio de todo este batiburrillo caótico y destructivo, se desarrolla la historia de «June Leigh».

Una escritora afligida, intentando lidiar con la presión diaria que supone vivir en el foco del conflicto, se ve envuelta en unas circunstancias comprometedoras que le obligarán afrontar sus miedos. Este drama psicológico que aborda un concepto interesante como «La Agorafobia» dentro de un contexto histórico conflictivo y sugerente, tiene algunas incongruencias conceptuales – La agorafobia es un miedo a los espacios abiertos. Salir a un espacio abierto les hace sentir vulnerable e indefensos a causa del miedo y la ansiedad; lo que se observa en el comportamiento de June. Sin embargo, el concepto se desmorona con ese final que descarta la agorafobia por un aislamiento autoinfligido… – que me descolocan.

A todo esto, tenemos un ritmo irregular. El comiendo es prometedor, pero este va decayendo considerablemente a medida que avanza. No obstante, durante la recta final, consigue “compensarlo” reflejando la histeria y el vandalismo que surgió durante el apagón que tuvo lugar del 13 al 14 de Julio de 1977.

Siendo sinceros, podría haber dado más de sí. Tenía un contexto histórico prometedor que no han sabido aprovechar. No obstante, siempre es un placer disfrutar del talento interpretativo de «Naomi Watts». Nos obsequia con una actuación desaliñada convincente que, a pesar de a sus intentos, no consigue salvar la pelicula.
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|д°)ノAl menos verla una vez °☀︎‧

La hora del miedo (The wolf hour) es una película dramática protagonizada por Naomi Watts.

Una escritora en un proceso de depresión que parece provocarle agorafobia, vive en un piso sola en el sofocante verano de 1977. Debe lidiar con sus males, y con los de fuera, que ve desde la ventana.

Aburridísima. Vemos a una Naomi Watts que hace lo que puede con lo que le han dado. ¿Y qué le han dado? Una película en la que una mujer con fantasmas personales no sale de su piso, dialoga con las visitas va recibiendo (una vieja amiga preocupada, el repartidor de comida,...), al tiempo que trata de recuperar su escritura.
Ya está. 80 minutos de casi nada, de algo más plano que la línea del horizonte en el océano. En el tramo final sí pasan cosas, pero con una frialdad, que al terminar me he quedado un poco con la mirada perdida tratando de analizar si había algo analizable. Que sí que lo hay, pero mis ganas de esforzarme en esto son las mismas que las que han tenido ellos en hacer una película entretenida.

Película que busca explorar la agorafobia y la paranoia en un contexto de aislamiento. La trama se desarrolla en una única localización, con Naomi Watts asumiendo el papel principal en todas las escenas, fumando y mirando por la ventana la mayor parte del tiempo. Aunque la película intenta crear un ambiente opresivo y desesperante, no lo consigue.
La actuación de Naomi Watts es lo único pasable de la película, ya que intenta aportar una cierta profundidad a su personaje.
La historia se esfuerza por construir una sensación de tensión y peligro, pero esta tensión rara vez se traduce en momentos verdaderamente impactantes o emocionantes. En su lugar, la narrativa se siente lenta, repetitiva y aburrida, lo que contribuye a la sensación de tedio que domina gran parte de la película.

Es una película pesimista y dramática sobre un trastorno llamado agorafobia. Llega el final y es un despropósito, todo lo que has estado experimentando durante el film es totalmente fingido y autoinfligido ¿Que se suponía que era real? Pues ya no, es una pantomima total.

Muy buena escenografía aunque bien escasa, la mayoría del film transcurre en una habitación. Buena calidad de imagen y sonido.

No puedo recomendarla, aunque Naomi Watts haga un buen papel se me queda algo escaso.

La hora del miedo

June E. Leigh fue una vez una figura conocida de la contracultura. Ahora vive sola en su apartamento casi aislada del mundo exterior.

Desde un principio y tras leer la sinopsis no me andaba llamando para verla, no obstante le di una oportunidad con las mínimas ganas posibles, y debo decir que me ha sorprendido para bien, pues ofrece algo que te hacer verla desde inicio a final.

Por un lado encontramos una trama simple pero que ofrece mil maneras de que se desarrolle dicha trama, ya sea como hemos visto (interactuando lo mínimo posible con el mundo exterior) o incluso haciendo que todo se complique lo máximo posible, a mi me ha parecido adecuado la manera en como la protagonista ha ido actuando ante ciertos momentos.

Por otro lado, lo que más destacaría es como Naomi Watts con su actuación ha ayudado a que la protagonista y sus diferentes matices destaquen y mucho, aunque había momentos en los que no me gustaron ciertas cosas, la película es bien llevada por la actuación de Naomi haciendo que se te haga super corta y prestes la completa atención a lo que se va viendo.

the wolf hour (la hora del miedo) es una película de suspense dirigida por Alistair Banks Griffin que trata sobre june una figura conocida de la cultura que vive encerrada, aislada del mundo exterior mientras afuera las calles arden y la violencia se intensifica en el verano de 1977 en nueva york.
No destaca por su acción precisamente es lenta, pausada quizá demasiado para mi gusto, como personaje principal tenemos a naomi watts en la piel de june la escritora encerrada y acosada siendo lo mejor de la misma el resto de actores están de paso indiferentes, circunstanciales, no la recomiendo me parece perder el tiempo.

Película de suspense y drama que nos sitúa en el año 1977 en Nueva York, en la parte sur del Bronx.

June Leigth escritora de éxito que viene de una familia muy acomodada vive atormentada y aislada en un sucio apartamento del sur del Bronx, aislada del exterior y de prácticamente de comunicación con la sociedad, vive sola y amargada por un suceso trágico del pasado.

Toda la historia se desarrolla en este sucio apartamento y el peso de la trama está sobre los hombros de Naomi Watts que interpreta a June Leight. Su interpretación es muy buena y consigue transmitir al espectador su deplorable, depresivo y en varias ocasiones su angustioso estado.

Los demás actores que intervienen para darle cierto diálogo a la película pasan por ella sin pena ni gloria.

Otro punto a favor los planos de lo mugroso que es todo.

La historia en sí me ha parecido bastante aburrida porque es simplemente mostrar la mala vida que lleva una escritora de éxito que si no fuera por el misterio de quien la llama continuamente al timbre del telefonillo el interés sería prácticamente nulo de esta película, ese hecho que luego no lleva a ninguna parte es lo que consigue tener de alguna manera atrapado al espectador más curioso porque seguramente que el que no sea curioso haya abandonado la película por no tener un contenido especialmente atractivo.

Le dan un final coherente, que por lo menos no se te queda cara de tonto diciendo, no me ha gustado la película y encima es un final que te deja a medias.

En definitiva, una película aburrida con un buen gancho que no lleva a nada, ritmo lento pero en ocasiones con ciertos momentos de interés, muy pocos y leves. No la recomendaría por su pobre contenido, aunque ella haga una actuación más que aceptable.

Estoy casi seguro de que es la segunda vez que veo La hora del miedo (The wolf hour), aunque no la recordaba, lo cual no quiere decir que sea mala, ojo, pero uno va teniendo una edad y el disco duro puede petar con tantas horas de visionado.
Estamos ante un drama/thriller PSICOLÓGICO, siendo esta última palabra la más importante, y por ello la resalto. Esto hace que si eres más de acción, ésta quizá no sea una peli para ti.
June es una escritora sumida en una crisis múltiple que ha ido creciendo por efecto dominó: mental, existencial, creativa, económica... aunque no necesariamente por este orden. Podemos presumir que el desencadenante de todo esto ha podido ser la muerte de su padre.
Padece agorafobia y algo de paranoia, por lo que lleva un tiempo recluida en su casa y solo tiene contacto con el exterior de dos formas: indirectamente a través de la radio y la ventana, y mediante escasas interacciones sociales, divididas a su vez entre llamadas telefónicas y visitas.
Entre estas últimas tenemos a Freddie, el repartidor de la tienda de comestibles, a Margot (creo que es su hermana, no sé si me perdí algo de su conversación), a un policía repugnante llamado Blake y a Billy, cuya presencia es solicitada por June a una casa de citas, quizá inicialmente buscando más protección que compañía carnal, pero que acaba resultando ser uno de los catalizadores para su mejoría, pues con él logra desnudarse (literal y figuradamente), desahogarse (también en dos sentidos), y sentirse bien con algo, en este caso alguien, de una vez. Durante la visita se sincera a la vez con él y consigo misma y esto resulta positivo para el desbloqueo creativo y su recuperación.
La trama tiene lugar durante el verano del 77 (también llamado Verano de Sam, pues por aquel entonces el llamado Hijo de Sam, David Berkowitz, llevaba un año ya cometiendo sus violentos ataques) en que las temperaturas infernales apenas bajaban de los 40 grados, y además en un barrio poco recomendable (creo que no se llega a mencionar pero probablemente sea entre el sur del Bronx y Harlem, al norte de Manhattan), lo que crea un entorno opresivo y hostil que sumar a los padecimientos de June.
Finalmente, durante el famoso apagón que tuvo lugar ese año, y en el que los picos de violencia, altercados y pillaje aumentaron considerablemente, cree ver a Freddie siendo atacado por un policía, y eso le hace decidirse a salir por fin de su apartamento para acudir en su ayuda. Cuando comprueba que no es él, decide al estar ya en la calle irse a dar un paseo por el desastre hasta que contempla un simbólico amanecer. Tras esto, elipsis y vemos que su nuevo libro, Season in the abyss (¿guiño a Slayer?), ha sido publicado y ya recuperada y con imagen renovada es entrevistada de nuevo por un viejo conocido.
Espléndida interpretación de Naomi Watts, sobre todo teniendo en cuenta que lleva todo el peso de la película y el meollo de la cuestión ocurre íntegramente en su interior.
No me he olvidado de las llamadas misteriosas al telefonillo, que podemos interpretar, apoyados por el hecho de que no ve a nadie en la calle al asomarse por la ventana, como un mecanismo de defensa que la mente de June crea para darle toques, nunca mejor dicho, y decirle que debe salir del agujero en que se encuentra.

Película de miedo en la que se pasa toda la película en una habitación, y de terror tiene entre cero y nada, y de claustrofobica, menos.

Lo más interesante son los distintos tonos que le dan a la película las personas que van pasando por su casa, por lo demás...