Película diferente a lo que estamos habituados, en la que gran parte se desarrolla en blanco y negro, pero se irá intercalando con escenas en color cuando la historia lo necesite y evoque unos determinados sentimientos. En su aspecto visual, es una belleza, con unas escenas cuidadas, en la que hasta los silencios se hacen hermosos. Recomiendo verla en Vose, pues hará destacar muchas escenas como una simple poesía o alguna bella canción.
En cuanto a la historia, transcurre tras la Primera Guerra Mundial, una chica va a dejar flores en la tumba de su amado, pero resulta que ya hay otra persona que también le deja, con lo que... quien es esa persona, de que conocía a su pareja......etc, Una vez que descubre quien es esa persona, veremos una situación complicada debido al contexto social en el que se desarrolla.
Empieza interesante, con cierto misterio por ver hacia donde nos lleva, hasta que llega un determinado giro que hará cambiar el desarrollo de la película, después de ello, la película tiene unos minutos que se "pierde", pero tras ese "bache", vuelve a ese nivel inicial hasta llegar al desenlace.
Me ha gustado de que a lo largo de la película uno puede ir pensando por donde va a ir sucediendo todo, y ha habido varias cosas que no eran como yo tenía pensado con lo que puede decirse o al menos a mi me pareció de que no es predecible. También me ha parecido interesante ver como a los protagonistas le sucedía algo parecido a lo largo de la historia, me explico, cuando el chico va hacía Alemania, ve esas rencillas aún presentes tras la guerra, y, cuando ella va a Francia, ocurre igual , como que se ve fuera de lugar.
Buenas actuaciones de este dúo principal como son Paula Beer ,y, Pierre Niney.
En definitiva, una película de las que gusta encontrar de vez en cuando, para perderse en ella, y disfrutar con todo lo que nos cuenta y sobretodo el cómo lo cuenta,
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