Críticas de Pinocho

Es una de mis películas infantiles preferidas, si es verdad que las de Disney de antaño casi todas me gustan mucho, pero a Pinocho le tengo un buen recuerdo.
Y esa es básicamente la premisa de "Pinocho", una historia muy sencilla, pero muy bien llevada. A tal punto que me hace pensar que ha envejecido mucho mejor que muchos otros clásicos Disney. Porque lo más importante de esta película es que en ningún momento trata a los niños como si fuesen tontos. De hecho la película tiene un par de momentos bastante oscuros. Los villanos de Pinocho son mucho más tenebrosos, desgraciadamente en el mundo real existe gente así de mala. Gente como el honrado Juan y Gedeón, que se aprovechan de la inocencia de otros para lucrarse.

Película de la época dorada de Walt Disney. si vamos más allá podemos ver el paso de la infancia a la madurez, como convertir a un niño en un hombre. Muy recomendable para toda la familia.

Pero, ¿todas las voces interiores son iguales? ¿Todos compartimos una misma conciencia sobre el Bien y el Mal? El debate es más divino que humano, pero está claro que en «Pinocho» entienden que la conciencia del ser humano es la mejor guía para andar por la vida, confiando en que si la escuchas atentamente terminará siempre por mostrarte el buen camino.

A esa vida maravillosa y trágica despierta la marioneta Pinocho gracias al milagro de un hada que vive en las estrellas. Como conciencia física tendrá al antológico Pepito Grillo, personaje encantador que nos narra esta surrealista, enigmática, emotiva y fantástica historia de superación, aprendizaje, maduración y amor. Estos valores ya no interesan. A los niños ya nadie les advierte que lo bueno parece malo y lo malo bueno; que ser sincero es un acto de valentía, que la generosidad es un principio básico y que lo humano no es ser un mamífero con cerebro racional. Pinocho es humano mucho antes de ser un niño.

Disney despliega una animación insuperable. Me río yo del avance virtual de las productoras actuales, que no han inventado ni mejorado nada por mucho que se insista. En «Pinocho» el fondo marino tiene un color y una vida que fluye como la mismísima naturaleza salvaje y esa ballena imponente se presenta aterradora por su impecable realismo pincelado de creatividad. Qué capítulo más increíble. No solo eso, sino que es asombroso el tratamiento cinematográfico de la película, que incluye travellings o planos secuencias como si de cine real se tratase. Esto es muy grande.

Una obra deliciosa. Bella y mágica. Siempre vigente y siempre recordada.

Qué entrañable es Pinocho y, al igual que muchos otros personajes universales de Disney, como Blancanieves o Peter Pan, es imposible imaginarlo con otro aspecto porque forma parte de la cultura popular.

Es una aventura continua la de esta marioneta que quiere ser un niño, con la moraleja de que los niños buenos obtienen su recompensa. No es de mis películas Disney favoritas, pero resulta muy tierna.

Mención especial para la animación, que muestra una cantidad de detalle increíble en el taller y en el mar.

Uno de los grandes clásicos de Disney en su primera época dorada. Pinocho una marioneta de madera que cobra vida gracias a la magia de un hada azul que viene de las estrellas y que su sueño es conseguir ser un niño de carne y hueso.

Sencilla historia donde nos muestran las aventuras y el desarrollo emocional, de madurez y sentimental de Pinocho. Una película donde nos muestran con muchas metáforas las diferentes decisiones de la vida, cosas buenas, cosas malas, donde te encuentras gente que te quiere ayudar o gente que se quiere aprovechar de ti. Y un personaje excepcional que encarna de forma física la conciencia del ser humano, Pepito Grillo, que será la voz que vaya aconsejando de la mejor manera al entrañable e inocente Pinocho, que con su naturalidad e inocencia no ve el mal ni la maldad en el entono complicado que le rodea.

Y por supuesto en esta historia está la relación padre e hijo, Geppetto, carpintero y creador de la marioneta de madera, que gracias a la magia del hada hace su sueño realidad de tener un hijo, en este caso la marioneta de madera creada por él, Pinocho. Excelente desarrollo de la relación de ambos durante la película.

Y hay que destacar sin ninguna duda su animación, haciéndola muy realista y con detalles muy trabajados durante todo su desarrollo, algo destacable para la época en la que se realizó.

Pinocho, personaje que no caducará nunca y que pasará de generación en generación con una frase que nos han dicho a todos: "si mientes, te crecerá la nariz como a Pinocho."

Recomendada por los buenos valores que nos muestra este largometraje de animación.