Posiblemente estamos ante una de las mejores comedias de los últimos años, sobre todo por el retrato que hace de la sociedad estadounidense desde una perspectiva irónica, pero a la vez ácida. Como en The Office es Michael Scott, en Parks & Recreation es Leslie Knope y en Shameless es Frank Gallagher, en Veep es, y ha sido la historia de Selina Meyer. Basada en la historia de The Thick of It (BBC) del propio creador Armando Iannucci.

Al principio de la serie el humor es tan simple (tipo caca-culo-pedo-pis), pero con el paso de las temporadas, la situación fue mejorando. Lo divertido de la serie es como se retratan los propios personajes. Grandes actores y actrices han formado parte de esta historia, como los ya conocidos Gary Cole (The West Wing), Peter MacNicol (Numb3rs), Hugh Laurie (House M.D.), Patton Oswalt (Ratatouille) o Kevin Dunn (Dave). Con un humor tedioso, inteligente y detallista, la serie se consagró con los premios a mejor serie de comedia de forma consecutiva entre otros.

La serie muestra una evolución de los personajes muy clara. Personajes como Gary, Dan, Amy o Mike sufren una evolución a lo largo de la serie, con sus virtudes y sus defectos. Da gusto ver como se tiraban los trastos a la cara sin importar lo que pensara el otro. Esta serie nos muestra una serie de insultos y sutilezas que ninguna otra serie de comedia es capaz de mostrar, sobre todo hacia el personaje de Jonah, que acabó convirtiéndose en el mejor personaje de la serie con una evolución brutal de un don nadie a vicepresidente de EEUU. Y una Selina Meyer que empezó siendo una vicepresidenta y se convirtió en la primera presidenta de EEUU, con todos los chanchullos que hizo. Le pintaron el trabajo de Vicepresidenta (Veep) como algo divertido, pero no es lo que ella se esperaba. Viendo la subida, la bajada y el resurgimiento de las cenizas. Y además merecidos esos Emmys a mejor actriz de comedia porque todo lo que toca ella, lo convierte de grafito a diamante.

Esta serie me ha dado la oportunidad de volver a tener fe en las series de comedia sin necesidad de risas enlatadas, y que sube como la espuma a partir de la segunda temporada. Con un final que hace justicia al devenir de los distintos personajes (aunque sintamos pena por algunos). Gracias por hacerme reír Amy, Gary, Dan, Sue, Mike, Jonah, Ben, Kent, Catherine, Richard, Tom, Furlong y Selina. Si la política está en vuestras manos, el mundo sería un lugar más divertido, ¿o no? No lo sé, no tengo esa posibilidad de ver otros mundos, pero sí diría que se asemeja un poco a los chanchullos de nuestro país. En cualquier caso si hay una frase para responder a alguien por si quiere ver esta serie sería: Shut the fuck up, you epileptic Picasso painting and watch it!. Una maravilla, y mi enhorabuena a Julia Louis-Dreyfus por retratar a la perfección la presidenta que nos merecemos.