Crítica de El sabor de las margaritas por chasillo

"El sabor de las margaritas" es un thriller que me ha enganchado, La temporada arranca con la desaparición de Marta Labrada, una adolescente, en una gasolinera de un pequeño pueblo gallego. La teniente de la Guardia Civil Rosa Vargas (María Mera) es enviada para encargarse del caso, que pronto se revela mucho más turbio y complejo de lo que parecía, desenterrando una red de corrupción, prostitución y secretos perversos. La serie tiene una gran ambientación, esa Galicia rural, con sus nieblas, paisajes melancólicos y pequeños pueblos como Murias, lo convierten en un personaje más. La fotografía de Suso Bello es oscura y envolvente, genial para construir esa atmósfera sombría. El ritmo puede ser algo lento en algunos momentos. Las actuaciones cambien son muy buenas. María Mera interpreta a una mujer con un pasado doloroso y una ética inquebrantable. Toni Salgado (la cabo Mauro Seoane) es el contrapunto, la policía de pueblo con sus propios secretos y lealtades. Nerea Barros (Pamela / Ana), que hace una colaboración, aporta una capa de oscuridad que va muy bien a la histona. Una buena temporada