Redactada: 2020-11-13
No las tenía todas conmigo con esta serie porque no soy muy de ciencia ficción y no sabía si me iba a enterar de algo, si iba a ser muy densa o qué. Al final, bueno, no me ha disgustado, aunque tampoco me ha apasionado, pero como digo no es mi género preferido. Es entretenida y bastante interesante, esa eterna lucha entre ciencia y religión, la creación de una nueva civilización con los problemas que van surgiendo inevitablemente y que tan difíciles de comprender son para unos androides programados de determinada manera... Aunque más que religión hablaría de fanatismo, y al final los androides son los que más sentimientos tienen y los que más se preocupan por la humanidad.

El problema que le veo es que tiene demasiados frentes abiertos y sigue quedando todo demasiado abierto, con más preguntas que respuestas, por no decir que no hay ninguna, a final de temporada. Como he leído por ahí, esta temporada tiene toda la pinta de introducción, como un piloto muy largo para el resto de la serie, pero no olvidemos que en un principio iba a ser una miniserie, así que no sé cómo pretendían abordarlo entonces. Sólo espero que para la segunda temporada vayan explicando y cerrando cosas en lugar de abrir más frentes y crear más incógnitas, sobre todo porque nunca se sabe cuándo pueden cancelar una serie y cuanto menos quede en el aire, mucho mejor. Además empieza muy fuerte, con más acción, y se va desinflando, los últimos capítulos se me han hecho bastante cuesta arriba. De todas formas no sé si veré la segunda temporada, pero porque no soporto las serpientes, no puedo ni verlas, es superior a mí.

No conocía a Amanda Collin pero está inmensa, se carga toda la temporada a sus espaldas y se come la pantalla, impresionante. En el extremo contrario está Travis Fimmel, que no es más que Ragnar 2.0 y me pone de los nervios.

Valoraciones en tu crítica:

Comentarios

Todavía no hay comentarios