Tras varios años alejado de su estilo más característico, el Tim Burton más tétrico y siniestro está de regreso y lo hace nada menos que con 'Wednesday', el esperado spin-off de la familia Addams sobre uno de sus más memorables y carismáticos personajes: la siempre impasible y mordaz Wednesday Addams. Burton, junto con Alfred Gough y Miles Millar —creadores y guionistas—, han enfocado la serie (al menos en su primera temporada) como una aventura detectivesca en la que nuestra querida Wednesday, tan aficionada a lo macabro como siempre, intentará resolver una serie de extraños asesinatos que están teniendo lugar en la Academia Nevermore, un lugar reservado para adolescentes con poderes sobrenaturales, marginados y demás inadaptados sociales. Un poco como Hogwarts pero lleno de bichos raros, góticos y, en definitiva, gente que mola pero que no encaja dentro de los estándares impuestos por la sociedad.

Sobre ese particular entorno académico, a medio camino entre la comedia de instituto y la investigación criminal, la serie irá creando un escenario donde nuestra protagonista no solo deberá luchar contra los numerosos peligros que acechan a Nevermore, sino también contra su aversión a interactuar con otros seres vivos y a gestionar sus emociones. Esto consigue que el personaje de Wednesday adquiera una serie de matices que, por suerte, son llevados a un nuevo nivel de complejidad gracias al magistral trabajo interpretativo de Jenna Ortega. Si Christina Ricci (quien también aparece en la serie) marcó a toda una generación con su Wednesday noventera, Jenna va camino de hacer lo propio a través de su gran manejo del lenguaje no verbal y de su genial repertorio de miradas asesinas. Maravilloso personaje para esta fantasía de estética burtoniana, humor negro y escenas para el recuerdo (inolvidable el momento bailongo del capítulo 4) que hará que muchos dejen de pensar en el miércoles como en un simple día más de la semana.