Potentísima serie de Michaela Coel (ella misma dirige, escribe e interpreta) en la que se nos cuenta la historia de Arabella, una conocida influencer y escritora millenial que una noche es drogada y violada. Arabella no es consciente de lo que le ha ocurrido hasta que la asaltan los flashes y comienza a replantearse toda su vida. Estamos ante una de las mejores series del año (y de los últimos años) por cómo se narra un trauma de estas magnitudes. Haciendo gala de un humor casi doloroso y con un tono de lo más actual, Bella se sumerge en una especie de catarsis en la que intenta comprender por qué le ha pasado lo que le ha pasado y cómo hacer que eso no la identifique para siempre. La miniserie no se enfoca en la búsqueda y exposición del violador, no. El verdadero argumento es cómo volver a sentirte bien contigo misma después de una violación, en cómo volver a confiar en la gente, cómo volver a disfrutar del sexo o las relaciones amorosas, en cómo volver a sentir. 'I may destroy you' es el viaje a través del trauma, de sus secuelas evidentes y las que escondemos de todos, las que terminan quebrándonos por dentro cada día que pasa porque una agresión nunca es culpa de la víctima. Una agresión depende única y exclusivamente de un agresor. Y si todo esto no os ha convencido, os doy otros motivos para ver esta serie:
1. La normalización del síndrome post-traumático.
2. El fiel reflejo social de una generación que necesita ser escuchada.
3. La incorporación de tramas en las que se refleja el racismo, la transfobia, homofobia, el suicidio o la violencia sexual contra hombres y mujeres.
4. La exposición de la depresión a través de figuras de éxito.
5. La soledad.
6. La ansiedad por crearse un hueco o un nombre en un mundo cada vez más polarizado.
7. La maravillosa cinematografía y música que envuelve la miniserie.
8. El valor de narrar tu propia experiencia, ya que Michaela Coel fue drogada y violada en un bar tras salir una noche a tomar algo mientras escribía la segunda temporada de su serie 'Chewing gum'.
9. Michaela Coel.
10. Ah, y Michaela Coel.

Imprescindible.

Pienso reivindicarla todavía más ahora que ha sido la gran olvidada en los Golden Globes. Queda dicho.

La verdad es que el primer capítulo, incluso el segundo, no terminaba de engancharme, no entendía a qué venía tanto revuelo con esta serie, pero a medida que avanza es una sucesión de "wow" que se te van clavando cada vez más profundos. Porque no se trata sólo de la historia de una mujer drogada y violada y su vida después de esa experiencia tan traumática y cómo la ha marcado, trata de la vida real, de todos los actos que nos pueden parecer normales hasta que echamos la vista atrás y nos damos cuenta de que no, no eran normales ni estaban bien, de ser escuchados, de la importancia de las redes sociales, de la importancia de normalizar las cosas, de que si eres mujer te escuchan menos, si eres mujer negra aún menos, pero si eres un hombre nadie te cree cuando dices que te han violado, como si eso sólo les ocurriera a las mujeres. Trata temas de rabiosa actualidad con una naturalidad que la hacen muy necesaria, y también de hacer lo que sea necesario y tomarte el tiempo que sea necesario para ti mismo y para desconectar hasta volver a estar a gusto y en paz. Y es que ese último capítulo, con todos los finales posibles que nos plantea, en realidad sólo nos demuestra que Arabella, por fin, ha conseguido encontrar la paz que se merece.

Ha resultado una sorpresa, la cuál ha merecido la pena cada minuto de ella.

-La rotura del alma...

Vamos a encontrarnos a una chica muy particular, muy alocada, que por desgracia un día cualquiera sufre una agresión sexual, y a partir de ahí comenzará este camino con multitud de situaciones para intentar cambiar y/o mejorar su vida.

Me ha llamado la atención la protagonista, la cantidad de gestos y caras, que es capaz de realizar en cada capítulo y según la situación. Y que pese a los graves problemas que le suceden suele esta siempre alegre. Esto podría ser también comentado con sus amigos más allegados, los cuales forman un gran trío protagonista, un tanto variopinto, pero que da gusto de verlos juntos en ese día a día, en el que pese a veces estar rotos por dentro, intentan alegrar al otro.

Es un tema espinado, ya no solo el principal que he comentado sino otros que van a ir surgiendo y que están muy de actualidad. Hace plantearte como reaccionarías ante tales hechos, y que soluciones podrías tu mismo buscarle.

Es entretenida, con capítulos cortos que generalmente apenas llegan a la media hora, además no te dejará indiferente con las emociones que puedes llegar a sentir, y cuenta con un buen trabajo en lo que es las partes técnicas.

De actuaciones, pues va a ser un poco decir lo mismo que en párrafos atrás, se destaca ese trío de amigos, encabezado por Michaela Coel, Weruche Opia, y Paapa Essiedu. No me hubiera importado haber continuado viendo alguna temporada más con esta gente, pero bueno, también a veces mejor algo corto y bueno que estirar y perder esa calidad.