Crítica de Infiltrado en el KKKlan por Migatoyyo

Acudir a ver una película de Spake Lee requiere una cierta dosis de fe en el director que fue, más si tenemos en cuenta sus últimos filmes, ante los que mi principal sensación fue la de desconcierto (sobre todo con la críptica The sweet blood of Jesus). En el cine de Lee el mensaje siempre ha sido un elemento fundamental pero el tiempo habia roto el equilibrio entre cine y mensaje hasta desnaturalizarlo y desproveerlo de interés para todo aquel que no fuera un militante de la "causa". Con BlacKkKlansman, Lee recupera el equilibrio perdido y, sin abandonar sus intereses, nos cuenta una historia con el propósito de divertirnos y, además, mostrarnos su mensaje. Así, el espectador puede encontrar su dosis de diversión sin sentirse en un mitin, pero al tempo puede comprender la dureza del conflicto racial en norteamérica e incluso transpolarlo a las sociedades de medio mundo actual.
En la parte final, Spike Lee prescinde de toda sutileza y nos muestra cómo siguen arraigados esos comportamentientos, esa ideología e incluso esas personas en la sociedad norteamericana. Y los que la vemos fuera de EEUU podemos extrapolar a nuetros países y como los movimientos ultranacionalistas intentan preservar las costumbres "originales" de sus países en pos de la defensa de la legtimidad de los fundadores auténticos de cada páis, ante la agresión de los extranjeros que los invaden. Viejas luchas en nnuevos lugares, que nos vuelven a traer ideologías excluyentes, peligrosas e inhumanas. (Ven que es imposible acercarse a Spike Lee sin entrar en el discurso)