Críticas de Richard Jewell

Muy buena historia real sobre un atentado durante los juegos olímpicos en EEUU, refleja muy bien cuando un guardia de seguridad hace un trabajo bien hecho, capaz de salvar un montón de vidas, pues solo murió una mujer, aunque hubo muchos heridos si no hubiese sido por su actuación habría sido peor, un héroe en toda regla, digno de admirar. Me esperaba algo peor pero me gusto bastante, sobre todo por la actitud de su abogado, esas miradas tan expresivas... me encantaron. Me da pena por Richard Jewell pues aprendió por las malas que la ley y su autoridades no siempre actúan bien.

Calidad de imagen, doblaje y sonido muy buena.

Recomendada.

'Richard Jewell' es una nueva obra del mejor Eastwood en su etapa crepuscular. Directo, conciso, con el colmillo afilado y el tacto necesario para emocionar con su relato. El reparto es el idóneo, repleto de grandes nombres y con las actuaciones necesarias.

Merece mucho la pena.

Sin artificios y con un ritmo genial, historia de manual con gancho basada en hechos reales que hemos visto ya mil veces con el agravante de no blanquear al personaje, al menos no mucho, y contarlo de forma que mantiene el interés, una más al haber de Clint!

Clint Eastwood es casi el director de las causas perdidas. Entre su extensa filmografía podemos encontrarnos prácticamente de todo, desde películas con un marcado componente de denuncia social, racismo e injusticias vitales hasta películas que intentan ir un paso más allá y redimir, de alguna forma, a personajes perdidos de la historia. Es este el caso de 'Richard Jewell', una obra con un marcado dramatismo que navega entre el biopic y la autoficción en su justa medida.
Richard Jewell es la típica buena persona de media edad, sin muchos amigos, dedicado por completo a su trabajo y un hijo abnegado. Durante los actos terroristas de los Juegos Olímpicos de 1996, Richard encuentra una bolsa con explosivos e inmediatamente pone a toda la gente que puede a buen recaudo. Una heroicidad que terminaría por costarle caro al situarle en la mira del FBI por su posible implicación en el suceso.

Estamos ante un filme bien estructurado y bien narrado que sabe mantener la atención de los espectadores y que nos insta a conocer la historia de Richard, una historia que merece ser contada.

Veo esta película atraído por su historia tras ver la 2a temporada de Manhunt, porque la verdad el caso Jewell es fascinante. Inserta en la corriente patriótica a que nos ha acostumbrado Eastwood desde hace un tiempo, se nos presenta a uno de esos héroes trágicos a los que la suerte se le trunca hasta presentarle como un villano. Me gusta mucho como se han implementado las entrevistas y los testimonios reales para dar forma a una narrativa mucho más interesante de la que pudo ocurrir en la realidad. Coincidamos en que en los biopics y géneros similares la realidad se adereza, se exagera y se le endulza con un aura de grandiosidad que ninguna vida corriente tiene; además, también tenemos que tener en cuenta que la historia presenta una serie de vacíos que objetivamente son imposibles de cubrir con otra cosa que no sea la pura especulación. Al hilo de lo anterior destaco las denuncias por calumnias debido al modo en que se presenta a la periodista que inicia la campaña de desprestigio contra Jewell (lo cual no exculpa a los medios de dejarse llevar por el sensacionalismo y el periodismo buitre), por eso también debemos de ser cautos y tener presente que los personajes se nos pueden mostrar en ocasiones limitados o de manera parcial.

Es un poco lenta, parece como que dura 3 horas (un poco la marca de Eastwood dirigiendo), la película es plana y lineal, básicamente es una película que se podía haber dejado en un corto de 10 minutos y se ha alargado metiendo cosas que no aportan nada, lo único bueno la actuación que es de diez

El puto Clint Eastwood lo ha vuelto a hacer!!

Esta película narra la historia de Richard Jewell, un miembro de la seguridad de los Juegos Olímpicos de Atlanta en el 96 que descubrió un "paquete sospechoso" que contenía una bomba y al que se le acusa de haber puesto la mochila para ganar popularidad.
Va contando todos los pasos de la investigación desde la perspectiva de Richard, desde las primeras sospechas y la filtración a la prensa.
Las actuaciones son muy convincentes y con mucho sentimiento, llegando hasta el punto de ponerte en la piel de Richard y de hacerte pensar en qué pasaría si tú estuvieses en su lugar.

Lo dicho, "Tito Clint" lo ha vuelto a conseguir.

Descubrí a Paul Walter Hauser en Kingdom, una serie de MMA (muy chula por cierto), y me pasé un par de temporadas dudando si realmente tenía una discapacidad, pero que va, es un actor tan versátil que consigue que te creas los personajes que interpreta.

Eastwood acertó de pleno en contar con él para protagonizar esta excelente película donde cuenta la historia de un malogrado héroe de a pie. El resto del reparto cumple con creces para conseguir que las dos horas de metraje pasen volando.

Clint Eastwood produce y dirige un nuevo drama critico basado en hechos reales, 'Richard Jewell', sobre el atentado en los Juegos Olímpicos de Atlanta.

'Richard Jewell' comienza lenta, mostrándonos la aburrida vida de Jewell, hasta que llega al punto detonante de la trama y te atrapa. A partir de ahí es un peliculón dramático, y no solo por la calidad de la dirección y el guion, sino por las magnificas interpretaciones de Paul Walter Hauser, Sam Rockwell y Kathy Bates. Y precisamente los dos primeros me sorprendieron mas, al estar acostumbrado a su interpretación cómica. Kathy Bates con su buena interpretación se vuelve a ganar otra merecida nominación a mejor actriz de reparto.
Jon Hamm no es de mis actores favoritos, pero en su papel de ser el personaje más odiado de la película también esta perfecto.

'Richard Jewell' se resume en un drama biográfico impecable, que consigue generar tensión e interés por un personaje humilde.

Clint Eastwood produce y dirige este biopic en el que narra lo ocurrido durante los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, cuando el guardia de seguridad Richard Jewell encontró una mochila con explosivos entre el público de un concierto. A partir de ahí, la película nos muestra el cómo Richard pasó de héroe a sospechoso de la noche a la mañana y el posterior juicio mediático al que fue sometido. La particularidad del film es que nosotros somos testigos en todo momento de la inocencia de Richard, con lo cual el interés no se centra tanto en el caso en sí mismo, sino en todo el circo montado por aquellos que solo buscaban un culpable sin importar quién fuera y en el sufrimiento de un hombre —genialmente interpretado por Paul Walter Hauser— cuyo único delito fue ser siempre demasiado metódico en su trabajo.

Si tuviera que reprocharle algo a la película sería que, al tratarse de unos hechos que ya nos pillan bastante lejanos en el tiempo y el espacio, es complicado saber qué aspectos están o no adornados y qué personajes han podido ser representados de forma demasiado maniquea. En cualquier caso, 'Richard Jewel' me parece un notable drama con buen ritmo, grandes actuaciones (no solo del protagonista, que Kathy Bates y Sam Rockwell se salen también) y una afilada y atemporal crítica hacia esos sectores del sistema, la administración y la prensa para los que cerrar un caso o conseguir un titular está por encima de la propia verdad.

Película dirigida por Clint Eastwood, sobre un guardia de seguridad y los actos terroristas acontecidos en una zona de recreo durante las olimpiadas de Atlanta 1996.

La recreación de los acontecimientos está muy conseguida, y quizás la escena de la bomba sea la puntilla.
Cuando se empieza a desconfiar de Richard, vemos como todo el mundo está buscando trapos sucios en su vida, todos están convencidos de que es demasiado tonto, demasiado gordo, demasiado bien educado para ser otra cosa que un bicho raro en el mejor de los casos, un terrorista sin el menor de los escrúpulos en el peor.
Un retrato estremecedor de cómo determinados individuos están dispuestos a destruir la vida de un hombre con tal de avanzar en su carrera.
Destacada actuación secundaria de Kathy Bates y una actuación principal muy poderosa de Paul Walter Hauser.
Es una historia muy bien contada. Recomendada.

Si os quedáis con ganas de más Richard Jewel hay una miniserie “Manhunt: Deadly Games” que durante 10 capítulos desgranan este suceso.

RICHARD JEWELL

Richard Jewell era un guardia de seguridad en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, el cual descubrió una mochila con explosivos en su interior y evitó un número mayor de víctimas al ayudar a evacuar el área poco antes de que se produjera el estallido.

La trama tiene sus cosillas buenas y malas, en las que expone de manera adecuada y te pone en contexto ante unos hechos que para mi dejan mucho que desear a los medios de comunicación por buscar ser el primero en dar una noticia, dando igual si puede repercutir de manera negativa sobre quien va la noticia, y a lo que es el gobierno y las entidades que lo defienden.

En general la peli no deja en ningún momento la sensación de que afecte al espectar de una manera u otra, pues te pone en situación ya sea para bien o para mal, haciéndote pensar si o es lo adecuado o no, o incluso pasturándote en que empatices con algunos de los distintos personajes y más sobre todo con el protagonista. Aunque siento decirlo, la peli no mantiene el gran nivel de como empieza, sino que va flojeando una vez lleves casi el final, cosa que me ha hecho pensar si su intención era mostrarte un gran producto desde un principio y vendértelo y dejando entrever un poco más light el final. Pero se puede decir que la peli se puede disfrutar adecuadamente y te entretiene.

Os la recomiendo.

Richard Jewell, de héroe americano a villano.
Clint Eastwood ya nos tiene acostumbrados a este tipo de historias y a los personajes que las rodean. Esos eternos anonimos que son la baza principal para contarnos estos dramas sociales, con cierta crítica hacia los poderes establecidos por su inhumana gestión.
Y ya conocemos de sobra la intencionalidad de este octogenario actor/director.
Adapta el libro American nightmare: the ballad of R.J. donde el título ya nos cuenta lo que nos deparará. Y ser cabeza de turco es una expresión muy fea y quizás lo peor que te puede pasar en la vida. Ser acusado injustamente.
Eastwood además de ser un buen contador de historias, es un gran director de actores, Sam Rockwell y Cathy Bates consiguen llevarnos por todo el carrusel emocional que presenta el relato y Paul Waller Hauser conseguirá con su bonachón personaje hacernos compartir su sufrimientante ante la injusticia que esta viviendo.
- Todos piensan que eres un trozo de beicon y quieren freirte. Sergio Leone hubiese pagado por incluir este peazo frase chulesca en algunos de sus spaghetti westerns.
Y casi le doy al stop cuando ha aparecido La Macarena y toda su fanfarria. Como la liaron los Del Río a nivel mundial.
Buena peli sobre el abuso de poder.

¡Boom! *~●)ﾛﾟ)〃

Richard Jewell, es un drama histórico.

☛La heroicidad del guardia de seguridad «Richard Jewell», al detectar una bomba durante «Las Olimpiadas de Atlanta», termina posicionándolo como principal sospechoso.

La historia está basada en un hecho real que sucedió en «Los juegos Olímpicos» de 1996 – El terrorista «Eric Rudolph» puso una bomba como motivo de reivindicación contra «Las autoridades, el aborto, la homosexualidad y el multiculturalismo» – dónde un eficiente guardia de seguridad llegó a evitar un daño mayor de lo que estaba previsto.

Encuentro dos críticas sociales, muy atractivas e interesantes, enfocadas adecuadamente: «La crítica hacia los medios comunicación» – La periodista «Kathy Scruggs» con tal de vender la exclusiva tergiversa los hechos sin importarle las repercusiones que pudiera tener en la vida de «La familia Jewell» – & «La manera de proceder de las autoridades» – El FBI que desea cerrar el caso a sabiendas que «Richard Jewell» no encajaba en el perfil – que en ocasiones denotan una ineficiencia laboral impresionante; que todo esto me ha recordado mucho a una serie documental «The Confession Killer» que refleja muy bien – Como algunos quieren “resolver” casos y se aprovechan de la situación – esto último.

Sobre el apartado técnico ¿Qué podría añadir? El modo de dirigir de «Clint Eastwood» me ha resultado llevada desde un punto de vista inteligente y sarcástico. Además sabe combinar perfectamente los elementos para producir una serie de sensaciones «Confusión. Enfado. Intriga. Lástima.» que no dejen impasible al espectador. Sin embargo el ritmo no termina de convencerme, pues (a mi parecer) va decayendo a medida que avanza la historia. El guion es bastante bueno, especialmente las frases que le corresponden a «Watson Bryant», que hacen que sea (para mi) uno de los mejores personajes de toda la película. Las interpretaciones también son notables a destacar «Paul Walter Hausser» – Su interpretación es impecable, pero su personaje me saca de quicio.. ¿Cómo puede ser tan ingenuo? ლ(ಠ 益ಠ)ლ – & «Sam Rockwell» cuyas interpretaciones me han sorprendido gratamente.

|дﾟ)ﾉ⌒●~*Al menos verla una vez.

Al principio me daba un poco de pereza ver esta película por el juicio de los medios y el acoso mediático, pero era un recelo infundado porque en cuanto empieza la investigación consigue captar toda la atención, transmitiendo una sensación muy bien representada por el abogado (el personaje que más me ha gustado).

La historia gira desde el punto de vista de Richard y su entorno (madre y abogado), pero también quedan representadas las instituciones de los medios de comunicación y del FBI. Las actuaciones son estupendas, en especial Paul Walter Hauser, Kathy Bates y Sam Rockwell.

Una buena película y una historia del 'falso culpable' interesante de conocer.

No conocía la historia y tenía cierta curiosidad a saber que el señor Clint estaba por ahí detrás.

Empieza con esa presentación del protagonista y luego al poco, ya con lo que es el hecho clave. Y a partir de ahí hacia el final , esa interesante investigación en la que si no conoces el final , será positivo, porque así durante la película hará que pienses una cosa...luego otra....Vamos, que vas a ser un investigador más haciendo sus premisas.

Puede que se haga un poco lenta en algunos momentos, pero en general , está bien desarrollada. Además, cuenta con un buen reparto, con caras bastantes conocidas, y en éste caso, las actuaciones que más me llamaron la atención fueron las de Sam Rockwell y Olivia Wilde, si exceptuamos al protagonista,claro.

Eastwood es, definitivamente, mi director reaccionario favorito, toda vez que no tengo del todo clara la ideología reaccionaria del gran Ford. Con todo y con eso, el bueno de Clint me tenía un poco desconcertado con sus últimas películas. Con Sully, el tren a París y la mula me quedé con la sensación de que no estaba pillando algo de una filmografía que en sus últimos coletazos es evidentemente política. Y así, mientras Richard Jewell avanzaba, iba pensando que era casi un calco de Sully, el héroe al que el sistema pone contra la pared, el tema del traidor y del héroe. Pues se ve que el abuelo Eastwood se imaginó mi cara, y la de alguno más, y decidió darnos una clave especial para despistados que diera luz a estas últimas películas. Así, gracias a que en Richard Jewell Eastwood enseña por fin todas las cartas de su mano, de pronto el director nos da la clave que alumbra la motivación de sus últimas películas. Y este no es otro que la pérdida en la fe en las Instituciones y la arenga al individuo para que, ante esa dejación de responsabilidades por sus dirigentes, tome las riendas y resuelva por su cuenta. Así en Sully planteó (aunque no es la primera película que entra dentro de esos parámetros y hasta sus héroes solitarios, incluido Harry entran en el perfil) como el individuo, un individuo impecable y ejemplar, se ve obligado a luchar contra el sistema para demostrar que su comportamiento fue intachable. Acto seguido, los muchachos de Tren a París son el último bastión contra el terrorismo y no lo son por ser parte del ejercito norteamericano, lo son por encarnar a través de sus educación los valores tradicionales del gran país de Donald Trump. Ahora le encuentro sentido a La mula, en la que Eastwood da un paso más y plantea que, en ese sistema que nos ha fallado, es licito encontrar el modo, aunque sea ilegal, de salir a flote, sin traicionar los valores tradicionales del bla bla bla. Y por último, Jewel, un hombre que yo no quisiera tener de vecino ( por pesado, que no por mala persona ) fiel creyente en las Instituciones, sobre todo en las policiales, sufre el acoso de ellas (añadimos a la prensa, cruel y sibilina, encarnada en el seductor personaje de Olivia Wilde) al punto de perder la fe en las mismas. Eastwood está reflejado en el descreimiento de Jewel más que en ningún otro personaje, más incluso que en hombre fuerte y resolutivo y por ello esa escena me parece el culmen de toda esta etapa creativa. Y ese pensamiento, que muchos podéis suscribir, me parece que es tan fácil de compartir como peligroso, porque si descreyendo de las instituciones que deben conservar las normas de convivencia que nos hemos dado entre todos, apostamos por la individualidad y el sálvese quien pueda, estamos abocados a caer en manos de depredadores como Trump, Bolsonaro, Salvini, Orban, Putin y demás. Si nuestras instituciones hacen agua, el único camino es luchar para limpiarlas y devolverlas a la senda de salvaguadia de los preceptos básicos de la convivencia. Pero Eastwood lo almibara tan bien (hay pocas cosas tan satisfactorias para el observador que ver a un individuo mostrar su poder ante el problema que nos desborda a todos) que es fácil comprarle el discurso. Por eso, y por otras muchas cosas, estrictamente cinematográficas, es uno de los mejores directores de las últimas décadas.
Y hablando estrictamente de cine... ¿qué pega le puedo poner a un maestro de esto? La película tiene la fuerza que le faltaba a Tren a París, posiblemente porque cuenta con unas interpretaciones estupendas, hecho que faltaba a la otra, tiene el ritmo que le faltaba a La mula, posiblemente porque el argumento de aquella estaba estirado más allá de lo necesario, y es mucho más divertida que Sully.
Si este es el testamento de Eastwood puede estar tranquilo, pues es un epílogo acertado para una filmgrafía estupenda. Y si no lo es... pues eso que nos llevaremos.

"Richard Jewell" nos cuenta la historia, basada en hechos reales, del mismo Richard Jewell, guardia de seguridad en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996. Durante una celebración en el Centennial Park de Atlanta, Richard identifica una mochila sospechosa y alerta a las autoridades para activar el protocolo ante este tipo de situaciones. Gracias a su actuación, se evitó una gran catástrofe durante los juegos. La investigación del atentado terrorista, por parte del FBI, coge un rumbo poco esperado y Richard, el héroe local, pasa a ser el principal sospechoso del atentado.
La película tiene un buen ritmo, aunque sea larga, no se hace pesada. Mantiene la atención del espectador. Una película con un mensaje claro hacia el juicio mediático y el papel que pueden tener los medios ante los sucesos.
Película muy recomendada, no creo que te decepcione.

La mejor película de Eastwood desde Gran Torino.

Cuenta con un reparto sensacional que se desenvuelve como la seda en un guión muy sobrio y sólido, que en ningún momento se deja llevar por el espectáculo, marca habitual del cine de esta leyenda de 89 años.

A mi parecer se merecía mas nominaciones esta película.

Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, cuando el guardia de seguridad Richard Jewell encuentra la bomba que explotó. Y después esta la historia de cómo pueden destrozarte la vida. Y piensas que te puede pasar a ti. Clint Eastwood como siempre excepcional.

"Richard Jewell" narra la historia del hombre que lleva por título, que fue el guardia de seguridad que encontró la bomba que explotó en el Centennial Park durante los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996.

Vaya forma de destrozarle la vida (y la imagen) a un hombre. Toda la persecución que vivió Richard Jewell no tiene nombre. El pobre hombre salvó innumerables vidas por hacer su trabajo lo mejor que sabía y recibió como "regalo" la persecución mediática y policial. No hay derecho.

Sam Rockwell está estupendo en el papel de abogado. Me he creído todas y cada una de las palabras que decía. Pero sin duda quien destaca es Paul Walter Hauser como Richard Jewell. El discurso final en los despachos del FBI me ha parecido de lo mejor de la película.

PD: Pensaba que la chica que le hacía fotos a su madre justo delante de la bomba sería una pieza clave en la investigación por haber pillado en la foto a quien ponía la bomba en el momento exacto, pero al parecer simplemente era una extra más.