Críticas de Cocktail

Cocktail es una película es kitsch, convencional y ridícula, pero francamente es un placer verla. Tom Cruise interpreta a un joven que aprende a preparar cócteles de una forma ligeramente homoerótica y coreografiada por lo que bien vale la pena verla para divertirse. Incluso diría que es la prueba de que la película no se toma totalmente en serio a sí misma. Además, nos encontramos con un esquema bastante clásico: encuentro, separación, reencuentro, pero francamente ésta es probablemente la separación más delirante que he visto nunca. En las películas, a menudo se trata de un malentendido insoportablemente asqueroso, y los personajes tardan diez años en admitir que en realidad no ha pasado nada y que se quieren... Tom Cruise engaña a su novia a plena luz del día por una apuesta... Pero al mismo tiempo ella tiene que entender que si te proponen un reto tienes que aceptarlo, de lo contrario no eres un hombre de verdad. ¡Especialmente si hay 50 dólares en juego! Por una vez tenemos una razón real para una ruptura, pero la mejor excusa es la que da Tom Cruise: me entró el pánico. Si eso no es genialidad... Supongo que es lo que tenían los 80. Pero me divertí mucho, aunque tengo que reconocer que sólo por Tom Cruise contoneándose agitando botellas y por el aspecto kitsch totalmente asumido, luego pienso cuando se subió a los coches en la Gran Vía de Madrid y se me pasa. Creo que hoy tiene más encanto que entonces, porque ahora tiene ese aire de antaño y, sobre todo, conocemos a Tom Cruise, que entonces estaba en los inicios de su carrera a pesar de tener ya un gran éxito con Top Gun, y ver al actor que consigue jugar con Kubrick, Spielberg, Mann, De Palma.... moviéndose como un loco para preparar un cóctel tiene un encanto inimitable. Es un poco como volver a ver una vieja foto de clase, con los peinados y la ropa inverosímiles de hace treinta años.

Para mi "Cocktail" es básicamente un clásico ochentero protagonizado por Tom Cruise y Elizabeth Shue.
Y lo cierto es que a mi la historia de Brian Flanagan que (interpretado por Tom Cruise) es un joven ambicioso recién licenciado del ejército, que trabaja como camarero en un local de copas de Nueva York para poder costearse los estudios, me gustó bastante.
Y que gracias a los consejos de su jefe y posteriormente amigo Douglas Coughlin (Brian Brown), se acabará convirtiendo en la atracción del local.
Pero lo cierto es que Brian tiene otros sueños que son los de abrir su propio local con el nombre de "Coktails y Sueños" .
Y como suele pasar en este tipo de películas pues hay un romance que comienza cuando para poder costearse su sueño el joven Flanagan, se va a Jamaica a trabajar de camarero, y es allí donde conoce a Jordan Mooney (una exhuberante Elisabeth Shue), que se encuentra de vacaciones en la isla...
¿Será el amor para Brian un obstáculo para poder cumplir su sueño? ¿O podrá balancearlo, agitarlo y mezclarlo todo como los buenos cócteles?
Pues si quieres saber la respuesta a esas preguntas te recomiendo que te veas esta película que creo que será de tu agrado.