La primera temporada me gustó, pero no me apasionó, le veía mucho potencial y era entretenida, con una mitología muy rica y mucho por explorar y explotar, pero sentía que le faltaba algo.

Después llegó la segunda temporada, mucho más rica en todo, tanto en acción como en información, mostrándonos nuevos mundos y nuevos personajes y me encantó, y sobre todo situaba cada pieza donde debía estar, tanto en el puzzle que ya se iba formando, como en el tablero dispuestos para esa gran guerra prometida. Por eso esperaba que la tercera temporada fuera mucho más grandiosa, que con todo ya en su sitio terminara de explotar y hubiera más acción y también nuevas revelaciones... y no ha sido así.

Me siento realmente decepcionada con esa última temporada, tan sólo salvo un capítulo que es de los mejores de la serie, incluso el mejor, y ni siquiera es el último, pero todos los anteriores se me han hecho lentos y pesados y hace que la sensación final sea muy agridulce. Lo que más me decepciona es que, tras tantas aventuras, historias, dramas, mundos, criaturas, enfrentamientos, ángeles, etc. todo quede reducido a una historia de amor adolescente más, sobre todo porque al malo malísimo lo derrotan en un pestañeo y todo el último capítulo va de la relación de Lyra y Will y es lo único que importa.

Sí que quiero destacar una vez más esa riqueza en cuanto a la mitología de la serie, todo lo que abarca, sus personajes, algunos tienen una evolución espectacular y otros se ganan tu corazón desde el minuto uno, y también la fotografía, me parece muy buena, y los efectos están realmente bien conseguidos, teniendo en cuenta que tiene muchos, los animales no se notan extraños y eso es de agradecer. También el reparto tan bueno que tiene, desde Dafne Keen hasta Andrew Scott, pasando por Ruth Wilson, Lin-Manuel Miranda y James McAvoy, que sin duda era el gran reclamo de la serie en sus inicios y aparecía medio minuto en toda la primera temporada.

Cuando en el año 2005 me regalaron los libros de la saga de Philip Pullman, no me esperaba que lo que llegase a encontrar en esas páginas fuese una de mis primeras sagas de lectura que jamás olvidaré y que se convirtió en algo que sigo teniendo en casa, aunque esta siga cogiendo polvo. En el año 2007, se le dio mucho bombo al estreno de una película basada en las novelas que, a pesar de un gran reparto conocido y unas escenas de efectos especiales algo conseguidas, no consiguió atraer tanto a público como a crítica dejando en un hiato a esta saga, hasta que en 2019 la BBC mostró la serie en colaboración con HBO para su emisión internacional y se convirtió en una de las sagas fantásticas que necesitaba la BBC para enganchar al público juvenil. La historia es algo interesante pero aquí las interpretaciones se llevan la palma.

La historia nos presenta a Lyra Belacqua, una niña huérfana que vive en Oxford y está inquieta por saber qué hay más allá de las paredes de la Universidad y siempre anda por los tejados de la legendaria Universidad hasta que el descubrimiento por parte de su tío Lord Asriel, que al final se descubre que es su padre, le lleva a pensar que no se encuentran solos en este mundo, sino que existen criaturas que no son de este mundo a través de las Luces del Norte/Auroras Boreales, al igual que descubren una partícula conocida como Polvo/Materia Oscura. A su vez, el mundo conocido por Lyra está regentado por una institución que mantiene el orden: El Magisterio, algo parecido a una teocracia cristiana. Lyra llega a descubrir que lo que hay en el Norte cuando descubre a las brujas y otras criaturas.

El mundo que se consigue crear de la adaptación de Philip Pullman es de los más interesantes y con unos personajes ricos en historias que da pie a la comedia pero en el que el tono general es el del drama llegando a veces a volverse muy oscura. El personaje de Lyra, aunque a veces se convierta en algo cansina o repelente, deja de serlo cuando ves que la interpretación de Dafne Keen es sobresaliente, al igual que la de Marisa Coulter o la de Lord Asriel. El personaje de Will aporta una química al duo protagonista que mantiene ese nivel incluso llegando a la lucha entre ambos. Y sobre todo, las aportaciones de secundarios como Lee o de Pan que hacen que algunos momentos entre tanto drama, consigan aliviar la trama que a veces muestra una gran carga. A la vez que muestra un multiverso en el que cada mundo tiene su significado pero en el que hay un nexo común: los Ángeles . Releyendo los libros antes de que se estrenase cada temporada, podría decir sin atisbo de duda que es de las mejores adaptaciones que se ha hecho para televisión o cine. Es verdad que el formato a veces puede resultar lento pero te van dejando respuestas a cuentagotas y muchos capítulos, a pesar de descubrir un mundo más complejo, con esa duración a lo mejor no engancha tanto a mucha gente.

En definitiva, es una historia de las más redondas que puede haber en el panorama fantástico, pero que por sus interpretaciones, merece tener más valoración. Sin embargo, una historia que acaba con ese capítulo final para algunos puede resultar anticlimático, pero es que no habría otra forma de explicarlo. Aunque sea así, muestra el mensaje que al principio nos llevaba la serie, esta no es una historia de "final feliz", sino que será algo más complejo y triste, con mundos interesantes y a la par que oscuros.